Por Pancho Ugarte / Fotos por Valentina Palavecino
Los días habían estado algo calurosos en Santiago, y ese día no fue la excepción. Con la Alameda y su tránsito vehícular cortado, caminé hacia el Caupolicán. Por cada paso que daba acercándome al teatro, más notaba que en el ambiente habían aires de locura por bailar y llorar.
Al entrar al recinto escucho que suenan unos boleros brasileños, mientras los técnicos preparaban el escenario. De pronto se apagaron las luces y los gritos del público adornaron todo el lugar. Entró Alex Anwandter, y fue ahí cuando el escenario se pintó levemente de rosado. Los humos brotaron desde el público y sonaron los primeros acordes de una noche alta en sabrosura pop y ricas frecuencias para hacer bailar.
La canción que abrió la ceremonia de danza fue ‘Axis Mundi’, track número seis del nuevo trabajo de estudio titulado Latinoamericana. De a poco se fue evidenciando que el repertorio tendría de todo y que incluiría muchas canciones antiguas; así pasaron hit tras hit, coro pegado tras coro pegado. Hasta que llegó a una de mis canciones preferidas ‘Intentarlo Todo de Nuevo’, que hasta ese momento no sabía, pero nació como un homenaje a Juan Gabriel. Seguido a eso, el olor a marihuana aparecía en bocanadas desde quién sabe dónde; Alex lo evidencia diciendo que lo encuentra escandaloso, pero le gusta por que al final somos todos ‘Rebeldes’.
Entre canciones Alex mencionó que los lanzamientos de sus discos siempre son algo que le gusta preparar, siempre es algo especial y que realmente es mucho trabajo el que hay que hacer, y claro quese notaba por cada detalle y por la tremenda interpretación. “Las canciones que yo escribo, finalmente obviamente no son para mi, no es como lo que yo escucho empieza; son para ustedes, para trascender nuestra propia experiencia y lo que queremos. Vivir un rato nuestros conflictos, nuestras luchas, bajo opresiones que sufren/sufrimos en conjunto, y aquí encontramos una especie de abrazo de resistencia en este ratito que estamos juntos” – expresó Alex, justo antes de tocar ‘Manifiesto’, junto el perfecto acompañamiento del teclado interpretado por Paula Rojas.
Para abrir la sección acústica íntima del concierto, Alex en soledad junto a una guitarra, interpretó un cover de la canción ‘Nadie como tú’ de Christina Rosenvinge. Seguido de eso, entró un piano de cola al más puro estilo broadway, potenciando de esta manera la complicidadque ya estaba fuerte con el público que coreaba cada canción que se les cruzaba. Así homenajeó un poco su niñez y su vínculo con Brasil, mencionando también que su padre estaba presente entre el público. Además expresó un potente mensaje llamando a no discriminar más a nuestros pares, que no estamos solos ni que mucho menos somos minoría.
Alex, con guitarra en mano, mencionó que esanoche cumpliría una especie de sueño, e invitó a Javiera Mena que se puso en el piano y a un Gepe que fue directo a la batería. Así comenzaron a sonar los acordes de ‘Sol de Invierno’ en un escenario que contenía a tres de los grandes exponentes del pop nacional. En eso entra la banda para tocar ‘Tatuaje’ con este feat de la muerte. Pasaron unas canciones con el baile como tónica constante, el lugar poco a poco se transformaba en una fiesta de amigos, cuando de pronto se suben al escenario Ale Sergi y Juliana Gattas de Miranda! (mi amor), para tocar ‘Siempre es Viernes en mi Corazón’, seguido de las canciones ‘Imán’ y ‘Bailarina’, de la agrupación argentina.
El show fue extenso, en donde hubo una gran coordinación de la parte musical y técnica. Vale destacar el trabajo realizado por los tres roadies de la banda, que se dividían sus labores por cada músico y sección del escenario, abarcando todas las necesidades, desde la entrada del piano hasta los constantes cambios de guitarras. Alex ya lo había mencionado:hacer lanzamientos de disco, siempre es algo especial, y por la calidad interpretativa de cada integrante de su banda, se notaba que había una preparación intensa, pues tocaron relajados y con gran fiato (como se dice por ahí: ‘sonaron apretaditos’). El sonido a ratos se sentía como si los bajos reinaran el lugar con sus onmipresencias, pero aún así la voz estuvo siempre predominante con buen volumen, permitiendo que el mensaje llegase a todos los rincones del lugar.
Con una presentación de aproximadamente dos horas y media, la banda cerró la noche con una tripleta de éxitos que por nada permitieron que me quedara quieto. ‘Locura’, el primer single del último disco, seguido de los intensos beats de ‘¿Cómo puedes vivir contigo mismo?’, y para finalizar; la canción que cierra los conciertos de Alex ya casi por tradición, ‘Amar en el Campo’, pero esta vez el último acorde del tema estuvo acompañado de una gran lluvia de serpentinas que inundó todo el lugar.
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Los seres que estuvieron a cargo de interpretar los instrumentos en la banda fueron: Raúl Abarca, en guitarra; Francisco (Victoria) Rojas, en guitarra; Felicia Morales, en teclados; Nacho Aedo, en bajo; Juan Pablo Wasaff, en batería; y Paula Rojas, en teclados.