Por Nicolás Navarrete
Fotografías por Rodrigo Cabrera
Tienen entre 20 y 23 años, cursan estudios de composición musical en la universidad de Chile, otros trabajan y son músicos a contrata para orquestas y combos. Dicen estar conscientes del nicho al que pertenecen, pero aún así rechazan ser encapsulados en el género de lo que se denominó “La nueva cumbia chilena”.
A mediados de la década del dos mil comenzó una fiebre por etiquetar todo (otra vez) como lo “nuevo” dentro del abanico de géneros musicales en Chile. Sin ir más lejos, en 2004, Carlos Cabezas al mando de Electrodomésticos nombró como “La Nueva Canción Chilena” a su álbum retorno. En ese caso podríamos hablar de que correspondía más bien al suspiro y la nostalgia por tiempos en los que las bandas como Upa y los mismos “Electros” movían con fuerza el piso de un chile bloqueado musicalmente -y culturalmente- por la dictadura. Pero la verdad quizás se asome un poco más allá; un recambió que intentó ser mas genuino, pero que con el tiempo desinfló.
Es en parte el sentimiento que comparten los chicos de Cuarta Pared, una banda debutante en los escenarios capitalinos y en las listas de reproducción de streaming, pero no por eso con un discurso menos definido.
A casi dos meses del estreno en Spotify de su primer sencillo “Amor de Sobra”, dos de sus nueve integrantes: Claudio Reyes (bajo) y Tomas Serrano (teclados) conversan con SACH sobre sus primeros pasos en un género que creen agotado, pero con una amplia diversificación en progreso.
“Quizás sea algo muy personal, pero es personal para otros en la banda también, entonces es casi como una sola idea con respecto a que no nos gusta la etiqueta de la “Nueva Cumbia Chilena”. Como que se agotó el tiempo, son muchas formulas repetidas” asegura Claudio ante la atenta mirada de su compañero, quien con una sonrisa complaciente certifica cada palabra sin la necesidad de un gesto de aprobación.
Lo cierto es que a Cuarta Pared no le ha ido nada mal, ya en sus primeros 3 días en la plataforma de streaming sumó 10 mil reproducciones. En sus palabras, se debe en parte a la expectación que tenían muchos de sus amigos y compañeros de facultad y la atención que provocaron meses de trabajo, ensayo y composición –“eso mueve gente”- asegura Tomas. Es precisamente en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile donde nació la idea de explorar la cumbia, pero revestida de otros géneros bailables. Una vez más (la misma ecuación que en los dos mil) es un campus universitario el nudo por donde cruzan los hilos.
“Somos de una generación que escuchó hablar de que era muy difícil conseguir no sé, ¿mil reproducciones? o llegar a sonar en otras ciudades. Pero no lo vivimos. Hoy nuestros amigos del colegio en provincia o fuera de Chile pueden escucharnos haciendo solo clic” es la anacrónica reflexión de Claudio, y continúa: “es por lo mismo, por la oferta de tanta cosa parecida durante algunos años, y que lo tenías que buscar por YouTube, que cuando te metes al celular y andas por la calle ya no piensas en buscar lo mismo”.
Es eso por lo que no se cierran a ningún estilo, asegura luego Tomas: “es darnos la libertad de robar deliberadamente a aquellas bandas que nos gustan y que creemos hacen un trabajo novedoso, como Moral Distraída. Y también, a la hora de componer y decidir como va a ser una canción, preguntarnos ¿Por qué no hacerlo? en vez de ¿deberíamos hacer esto o aquello?” .
En agregar Bachata, urbano y reggaetón a la cumbia no hay nada nuevo ¿En qué esá la diferenciación entonces en esta nueva generación de la que se sienten parte? La respuesta que aflora es espontanea. “En meterle lo que quieres meterle, no lo que debería hacerse” sentencia Tomas. Aseguran que el género va de capa caída, al menos en gran parte del publico universitario, en buena medida por que las bandas encontraron un “algoritmo” para el hit. Es cumbia la columna vertebral de cada canción, el mismo tono, los mismos remates y solo la visten muy livianamente de otro género. “Nosotros en cambio seremos una banda de Funk cuando queramos hacer Funk, y seremos una reggaeton band cuando de reggaetón se trate la cosa”.
Cuarta Pared se presenta el próximo 10 de marzo en bar Rustica, Barrio Italia y el 16 en el festival de bandas Flu! en el bar California.