Con una potente parrilla de artistas, la primera versión del Festival Alzadas llegará a las puertas del GAM con entrada liberada y un objetivo claro: abrir todo un ecosistema musical al público para brindar más oportunidades a mujeres y disidencias. En conversación con SACH, Paz Quintana, vocera de Musap, habla sobre la importancia de este evento.
Visibilizar proyectos musicales liderados tanto por mujeres y disidencias es la misión del Festival Alzadas, iniciativa organizada por el MUSAP que se realizará en el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) este sábado desde las 14.30 horas. Serán dos los escenarios en los que se reunirán artistas como Flor de Rap, Mora Lucay, Kamon Kamon Kamon y Una Típica Francisca y serán las encargadas de llevar música
La iniciativa está ligada al trabajo realizado por el MUSAP durante esta semana en la residencia artística IMPACTA, que busca aportar y profesionalizar proyectos musicales a través de la asesoría en tres ejes: producción musical, coaching en escenario y marketing y distribución digital. Esta segunda versión se está realizando esta semana en el mismo centro cultural y son jornadas completas y especializadas.
Paz Quintana ha sido parte de este proceso. La cantante y productora musical es una de las ocho cantantes que forman parte del grupo técnico que se encuentra asesorando a los cinco proyectos musicales que fueron seleccionados para la instancia. En esa línea, señala que su fin último es llegar a la internacionalización de estos para tocar en otros países.
“Nos dimos cuenta de que visibilizar era sólo una parte, que teníamos que hacer cosas tangibles para generar oportunidades, tanto para tocar como para desarrollarse artísticamente. Con esto nosotras generamos redes para que las artistas puedan salir a tocar a otros países y generamos espacios para tener más oportunidades en Chile de hacer música y generar conciertos”, dice la ex vocalista de la banda de fusión Tizana.
El festival les ha dado la oportunidad de unirse a distintas organizaciones que abogan por el apoyo de las mujeres en la industria musical. Esto se demuestra en el line up, el que agrupa nombres de cada una de las alianzas que participarán en el encuentro. Mora Lucay, Dania Nexo y Flor de Rap desde la curatoría de MUSAP; Señorita Chu, Masquemusica y Aura Bae desde La Matria; Kamon Kamon Kamon desde AMIK; Una Típica Francisca del catálogo de La Peluquería Records; y Armadillo Cactus de Atacama Records. Desde IMPACTA, se eligió a para presentarse en los escenarios de Alzadas fue Deja Vu.
Así también, se sumarán representantes del Festival Girl Power de Argentina, en lo que será una “visita ilustre”, en palabras de Quintana. Ellas traerán a Pequeño Bambi, mientras que desde Colombia llega Buha 2030.
Cuando hace tres meses se enteraron que habían ganado un Fondart para la realización del Festival Alzadas, MUSAP comenzó a organizarlo con fecha tentativa para diciembre. Por entonces, una de las artistas tentativas para invitar era la argentina Sara Hebe, sin embargo, lo tuvieron que adelantar para agosto. Esto les permitió tener un enfoque mucho más local.
Además, se sumará un tercer proyecto en alianza con el GAM que mezcla la tecnología y el arte. Se trata de hologramas que se proyectarán en las afueras del centro cultural y mostrarán imágenes de cuatro culturas originarias: chincharros, huentelauquén, mapuche y selk’nam. “GAM se enamoró de estos tres proyectos y hemos recibido un gran apoyo por parte de la organización, además que tenían la misma visión de nosotros para visibilizar la música popular y abrir un espacio para mujeres y disidencias”, cuenta Quintana.
Más oportunidades
Cuando MUSAP partió como organización lo hizo con la conciencia de que había una brecha de género en la industria musical. La idea estuvo sustentada por las cifras recogidas por Ruidosa en un estudio realizado en 2016, 2017 y principios de 2018, en donde analizaron 66 festivales de Latinoamérica para analizar la presencia de mujeres en sus carteles.
“Nosotras nos dimos cuenta de que era muy difícil optar a las oportunidades cuando trabajas sola. Y nos dimos cuenta de que la mayoría de las mujeres trabajan de forma independiente, es decir, muy pocas están en sellos. Desde esas cifras han pasado tres años, pasó una pandemia y además, estamos hablando solo de zona central, no estamos viendo la realidad de las regiones. Yo vivo en Villarrica y es mucho menos visibilizado, tanto para hombres como para mujeres. La música tiene que activarse más a nivel país”, señala Quintana.
Y añade que: “Acá la industria funciona así: se juntan hombres a carretear, inventan un festival y se invitan entre ellos. Todas las cosas se dan de manera social, entonces muchas mujeres que tienen hijos tienen que quedarse en la casa mientras el hombre sale a la sociabilidad donde se generan las oportunidades y dan vuelta en círculo. Hay mucho amiguismo”.
Además, esto no llega hasta el escenario, sino que también incluye lo que sucede detrás, ya que el equipo técnico del festival estará compuesto sólo por mujeres y disidencias. En palabras de la cantante, esto dará un ejemplo para niños/as y familias: “Hay dichos antiguos como ‘las mujeres no saben enchufar los cables’ y todavía persisten. En los escenarios hay un nivel de machismo súper potente cuando la técnica son puros hombres y tú te subes como artista”.
En la instancia del sábado estarán presentes distintos stands con las organizaciones aliadas, tanto nacionales como internacionales, con el objetivo de que quienes asistan puedan enterarse de lo que está sucediendo en el rubro. “Faltan espacios donde nosotras nos encontremos y es lo que estamos haciendo. Necesitamos más opciones, y el Festival es una semilla de una feria de industria. Hay que generar espacios donde esta socialización se dé también entre mujeres y que sea más paritario. Básicamente que se normalice”, finaliza la productora musical.