El próximo viernes 20 de octubre, la fotógrafa musical Jennifer Ramos (@crearcon_luz) realizará el lanzamiento de su primer fotolibro, donde plasma sus momentos favoritos de los conciertos que le ha tocado cubrir para algunos medios -como el nuestro- y también como registro personal.
El lanzamiento se realizará en Casa Coca-Cola ubicada en Dardignac #0154 (metro Baquedano) a las 16:00hrs. Allí, junto a un rico cóctail se dará paso a un conversatorio acerca de este proyecto mientras se proyecta un video inédito con las fotos que no fueron publicadas en el libro.
La presentación estará a cargo de la periodista Pia Vargas (Club de Amigos Comunicaciones) y la cantante Mariana Montenegro, quien también ofrecerá un show junto a Dënver. Ambas mujeres conocen muy bien el camino fotográfico de Jennifer, por lo que será una conversación amena y con más de alguna anécdota que contar.
Ya que el evento es privado y con cupos limitados, puedes conseguir tu entrada gratis escribiendo a jv.ramosrossi@gmail.com con el asunto «ENTRADAS FOTOLIBRO» y durante la próxima semana se fijará un día para el retiro de las mismas.
Conversamos con Jennifer para contarnos más sobre este proyecto y la importancia de la fotografía para los medios y la música.
¿Qué te llevó a crear un foto libro?
Bueno, lo primero es que como es un proyecto académico, tenía la opción de hacer una exposición o un foto libro, opté por la segunda opción ya que el año pasado hice una expo y además del gasto energético que implica, los cuadros a menos que seas reconocido o tengas el tiempo para itinerarla por galerías y poder venderlos, terminan siendo un bonito adorno de tu casa, y no, no quería eso, además que el tema no lo veía como para encerrar en un cuadro y por otra parte la cantidad de fotos que debía tener no me iban a caber en una expo ya que el proyecto de memoria de título tiene alrededor de 58 imágenes y en el foto libro hay un resumen de 33 fotografías.
Con el tiempo que llevas sacando fotografías de conciertos, ¿cuán importante crees que es este oficio, no solo para los músicos, sino que también para los medios y el periodismo?
Si quitamos el nombre “fotografía de conciertos” y ampliamos el campo de trabajo, nos damos cuenta de que absolutamente todo lo que nos rodea tiene fotografía, desde nuestro ojo que es como un lente y guarda imágenes en nuestra memoria para tener por siempre los recuerdos, hasta los usos más increíbles que ha tenido la fotografía desde sus comienzos como un apoyo en la medicina con el positivismo, en los registros de astronomía para posteriores investigaciones, o incluso en el arte como tal con el realismo en la pintura.
Ahora, si nos enfocamos sólo en lo que son los medios de difusión en la música bajo cualquier soporte (web o impreso) tenemos que la fotografía es una herramienta potentísima que, si se le saca un buen provecho, puede ayudar muchísimo a las bandas. En el último tiempo han ido apareciendo varios medios de difusión de música, cada uno con su sello e imagen propio pero básicamente si les sacáramos las imágenes, quedaría una fomedad que a nadie le interesaría leer, porque seamos sinceros, si yo veo un montón de texto en algún lado, por mucho que el tema parezca interesante, si no tiene una imagen (llámese imagen una foto, diseño, ilustración, logo, etc.) que me llame la atención y sea acorde al tema, probablemente lea las 2 primeras líneas y no quiera seguir.
¿Cómo has enfrentado este oficio que está compuesto mayoritariamente por hombres?
Uf… es complejo hablar de esto sin pasar a llevar a nadie así que espero no hacerlo, en el mundo audiovisual en general, predomina la presencia de hombres, porque se tiene la visión retrograda de que las mujeres no tenemos voz de mando por lo que se nos dan las tareas más “delicadas” como la dirección de arte de una producción, ojo y aquí recalco que no es siempre, pero si en la mayoría de los casos. Cuando una mujer toma una producción, desde la producción misma se nota, tenemos una visión más pulcra y conceptual por así decirlo, no quiere decir que un hombre no la tenga o no pueda ser más sutil en los detalles, pero si vemos las fotografías de conciertos aquí en Chile, nos damos cuenta de que hay una gran gran diferencia entre los hombres y las mujeres, de partida nosotras como que buscamos más allá de lo que estamos viendo, no nos quedamos con el típico retrato del vocalista gritando en su máxima expresión con una luz “perfecta”, al menos en lo que a mí respecta no me interesa una fotografía técnicamente perfecta, no necesito una imagen con una luz resplandeciente blanca ni que cumpla con las reglas fotográficas, prefiero capturar el momento a como dé lugar, por lo mismo en Kátharsis las imágenes son en su mayoría fotos bien oscuras, o con mucho grano incluso algunas sin un enfoque perfecto o un poco movidas, porque para mí la fotografía es eso, es tomar un instante y hacerlo eterno y por lo demás es mi propia terapia catártica.
Tal como dice Henri Cartier-Bresson, fotógrafo documental francés de la agencia Magnum: “en lo que a mí respecta, fotografiar es una manera de comprender que no puede separarse de los otro medios de expresión visual. Es un modo de gritar, de liberarse, no de probar ni de afirmar la propia originalidad. Es una manera de vivir.” Y así es como yo lo veo, con el tiempo la cámara se transformó en una extensión de mi mano y mis ojos, se hizo parte de mi día a día y es mi propia terapia.
¿Qué referentes tienes en la fotografía?
Hasta antes de este año, sinceramente no tenía referentes en la fotografía de música, mí “línea editorial” si es que se puede llamar así, iba más por el lado de lo documental, siendo Henri Cartier-Bresson y Dorothea Lange mis máximos referentes, luego empecé a meterme en todo un rollo con el color y su psicología viendo el trabajo de Steve McCurry y Amanda Friedman, pasando por la etapa de las puestas en escena a full color con David Lachapelle y ahí, empezó mí acercamiento a la música, pero sin un referente de música en vivo. Hasta que este año conocí a Marcos Hermes, fotógrafo brasilero con quien tuve la oportunidad de hacer un workshop en Valparaíso y además de potenciar mi estilo de fotos, me mostró muchos más referentes ya que para mí básicamente solo existía Carlos Müller acá en chile. Así fue como conocí el trabajo de Lynn Goldsmith, Annie Leibovitz, Michel Gondry y Mick Rock, probablemente haya muchos más, pero esos son los nombres que me saltan a la memoria en este momento siendo Marcos mi principal referente, no solo por el tipo de imágenes que crea, sino por su forma de ser y porque su trabajo me identifica mucho.