La cantante lanzó hace pocos días “La montaña”, el primer adelanto de su próximo álbum, en que captura sus sensaciones tras la revuelta social. Conversamos con ella sobre este estreno y la realidad virtual.
Fotos por Claudia Ardid
Los días avanzan en esta realidad distópica. A veces da la sensación de estar viviendo un capítulo de la serie Black Mirror. Seguimos adaptándonos a esta nueva vida. Frente a la pantalla del computador nos reunimos con Fakuta para hablar sobre su nuevo sencillo y cómo se ha adaptado a esta nueva forma de hacer música.
Fakuta en el estudio de su casa, con su piano de fondo, cuenta qué la inspiró para crear esta nueva canción llamada “La montaña”, que ya pueden encontrar en las distintas plataformas de streaming. “Tiene que ver con la idea de cómo se derrumbaba este Chile que existía antes. Mi manera de escribir es íntima y lo fui haciendo de esa manera, con ideas más poéticas. Me acuerdo que escribí dos estrofas e hice la música. Después era como ‘ah, le falta un coro’ para poder terminar. Y en marzo más o menos lo inventé. Tenía más esta idea de lanzarse a un abismo. Ya subiste a la montaña y te lanzas a un abismo. Era la energía que yo sentía de toda esta revuelta, que tiene que ver mucho con la juventud”.
Además, la cantante dice que también es una historia de amor porque “cuando uno se enamora rompe su propia estructura pesada y protectora. Su armadura para entregarse a algo incierto y que incluso puede ser peligroso”.
Su último trabajo discográfico fue ‘Tormenta solar’ (2014) y sus últimos sencillos fueron en 2017: ‘Abrazándote/Perfecto desastre’, donde experimentó el rol de productora. Sin embargo, sigue estando presente en la música chilena y es una de las voces destacadas dentro del pop nacional.
Dentro de esta realidad en pantallas, donde las emociones pueden ser una montaña rusa, le pregunto a la intérprete de “Invisible” cómo ha sido el proceso de creación. “Cuando pasó lo del 18 de octubre no pude componer mucho. No me salía. Además, que iba todos los días a Plaza Dignidad. Ha estado brígido. Me han estado pasando cosas desde mucho antes, por eso he tenido varios procesos. Después del ‘Tormenta Solar’ fue una cosa de decir por esto, de ser productora. Descubrí que necesito un ambiente súper equilibrado para poder llegar y escribir. Mis canciones siempre han sido desde la observación y no tanto desde el sentimiento como la rabia. Menos mal había otras cosas bien en mi vida y pude decir ‘es hora de mirar hacia dentro’ y me concentro en lo que tengo que hacer, que es hacer música”.
Realidad virtual
Aún no sabemos cuándo se podrá nuevamente ver a los artistas favoritos en vivo. Traspasar las emociones y sensaciones a la tecnología no ha sido fácil para nadie. Sin embargo, ha abierto la posibilidad de llegar a más personas, sin importar donde estén.
“He tenido suerte que he podido hacer sonar bien las cosas, porque es compleja esa parte. Aquí el show es desde la casa, o sea, tomárselo así. Este es un show desde mi casa, algo súper íntimo y creo que desde el principio la gente lo entendió así y le gustó mucho esa idea de que en el fondo, le abres la puerta de la casa y se conecta muy íntimamente. Si bien cuando uno toca en vivo tienes el aplauso, no tienes la opinión directa de las personas y ahora es como raro, porque tocas y no tienes el aplauso, pero la gente te comenta, te dice cosas bacanes. He sentido una conexión súper íntima con el público, que siento que lo agradece”, explica la intérprete.
El pasado martes lanzó el vídeo de esta canción que está disponible en el canal de YouTube de su sello Quemasucabeza. El trabajo audiovisual estuvo a cargo de Felipe Rebolledo, artista visual que actualmente reside en México y trabaja con el colectivo Interspecifics que experimenta en la intersección entre arte, ciencia y tecnología.
Sobre la concepción de esta pieza, la artista comenta que “es formato súper pandémico, así como una experimentación con gráficas digitales. Tiene que ver con esta manera de ver el mundo a través de computadores”.
Antes de cerrar este encuentro virtual, quisimos saber cómo visualiza Fakuta al Chile próximo, de cara al plebiscito del próximo 25 de octubre. “Todavía no me atrevo a decir en voz alta que gana el Apruebo. No podemos sentirnos seguros. Espero que lo podamos tomar bien en serio y ser bien aplicados en cómo vamos a construir este nuevo Chile. Lo más importante es que podamos hacer un país diverso, inclusivo, solidario, generoso y empático. Y ser más respetuosos entre todos”.