Créditos de fotografía: Agencia Uno
El comediante cerró su presentación con broche de oro. Luego de una hora de espectáculo, el artista se reencontró con sus ex compañeros de El Club de la Comedia, Sergio Freire y Pedro Ruminot, pero también sorprendió con la aparición de la banda penquista.
El comediante chileno Fabrizio Copano fue el encargado de poner la cuota de humor en la quinta noche del Festival de Viña del Mar 2023.
Una rutina que comenzó difícil producto de los gritos del público tras el show de Christina Aguilera, pero con el paso de los minutos logró ganarse el público con anécdotas personales, humor político y temas de la contingencia.
Con dos bis, el humorista cerró su presentación con broche de oro. En primer lugar, recordó la rutina de Sergio Freire en Viña 2018, específicamente cuando contó que el ex presidente Sebastián Piñera confundió a los ex integrantes del Club de la Comedia con Los Bunkers.
“Desde ese día, puta que me huevean con Los Bunkers. Cada foto que posteo ponen ‘Los Bunkers, Los Bunkers’. Pido hueás por Aliexpress y le llegan a Los Bunkers. Estoy chato que nos digan Los Bunkers“, relató.
Fue en ese contexto que aparecen sus ex compañeros del programa humorístico de Chilevisión, Pedro Ruminot y Sergio Freire, desatando la euforia del público.
“Quiero aprovechar este momento para pedirles disculpas, porque nosotros somos mucho más minos que Los Bunkers. Somos más parecidos a los Backstreet Boys“, indicó Freire, a lo cual Ruminot señala “la verdad, nos parecemos a Illapu”.
Luego de la aparición de Freire y Ruminot, comenzó a sonar una música de suspenso que anticipaba una inesperado regreso a la Quinta Vergara: Los Bunkers, banda que está ad portas de iniciar una gira de reencuentro con su público.
Álvaro López, Mauricio Durán, Francisco Durán, Gonzalo López y Mauricio Basualto aparecieron desde la parte más alta del escenario, en compañía de Rodrigo Salinas usando la vestimenta que caracterizó al grupo penquista en sus inicios.
De esta manera, Salinas tomó el micrófono y señaló “somos Los Bunkers y estamos chatos que nos sigan comparando con esos hueones del Club de la Comedia. ¡Vivan Los Bunkers!”.
