Fotografía por Diego Escalante
En entrevista con SACH, Daniel Riveros habla sobre el décimo disco de su carrera: “UNDESASTRE”. Un trabajo de profunda inspiración latinoamericana que ya se posiciona dentro de los favoritos del año.
No es descabellado pensar que el pasado 3 de octubre Gepe lanzó uno de los mejores discos de su carrera. Compuesto por 14 tracks, “UNDESASTRE” volvió a conectar con la esencia musical del cantautor chileno, aquella que mezcla el pop con sonoridades propias del folclor. “Es un disco de inspiración latinoamericana”, cuenta el artista en entrevista con Solo Artistas Chilenos.
Y es que en este nuevo álbum, el décimo en la discografía de Daniel Riveros, se pueden encontrar diferentes ritmos latinos que van desde los boleros y la cumbia hasta la cueca y la tonada (en un estilo propio, obviamente).
Adelantos como “Paloma” en colaboración con la joven folclorista chilena Belencha; el mood relajado de “playaplaya”; la explosión optimista de “VIVO” junto a Rubén Albarrán de Café Tacvba; la sensibilidad de “21 DE ENERo” feat. Monsieur Periné; y la hermosa “Bolero Libra” con Mon Laferte, venían preparando el terreno para un disco cargado de versatilidad.
— Cada álbum representa un mundo. En este caso, ¿qué ha significado UNDESASTRE para ti?
Mis primeras impresiones es que es un disco de alguien melancólico, un poco ansioso y que también buscó un lugar para decir las cosas y tratar de nombrar ciertas temáticas para hablar de algo más general o atemporal. Es un disco de música de inspiración latinoamericana, no es de folclor puramente tal. Es un disco que es como un ensayo y error acerca de nociones del folclor y hay unos diálogos con los elementos del folclor como es la canción La cueca del canario o Bandera de arena, que es una especie de tonada. Es un disco de inspiración latinoamericana en términos musicales.
— ¿Y qué fuiste aprendiendo en este “ensayo y error”?
Justamente lo que dice el título del disco, que al final el proceso orgánico o la honestidad más clara para con uno mismo es decir que somos una eterna contradicción y no necesariamente haciendo juicio de que sea uno más bueno o más malo. Uno es una eterna contradicción y es imposible encontrar la perfección, lo más pulcro o lo más limpio o darle en el gusto a todos, eso es imposible. Y tratar de contener eso genera mucha neurosis y este disco trata de mostrar lo feo, lo lindo, lo más o menos y lo gris de la manera más natural posible. Por eso se llama UNDESASTRE porque es un disco que no contiene, que desprotege las canciones.
— Este ya es tu décimo disco, ¿cuáles son los desafíos de un artista cuando ya alcanza este número? Imagino que pasar de los 10 discos puede generar algo
Sí, claro. Lo primero que se me ocurre es cómo mantenerse motivado después de tantos discos. A mí me parece que es natural, nunca me planteé eso, quizás el 2015 ponte tú que planteé algo sobre el trabajo de hacer música y todo lo que conlleva, como “¿qué tal si no toco más en vivo y no doy más entrevistas y solo hago discos?”, es algo que pensé en ese momento y ahora ya no. Lo principal es sentirse motivado haciendo cosas, desde hacer canciones y grabar discos —que lo encuentro recontrasúper entretenido— hasta hacer videos, entrevistas y cosas que suelen sentirse más trabajosas, pero que hay que encontrarle la vuelta. Cuando uno tiene algo que decir y está encantado con lo que dice, finalmente se pasa bien.
— ¿Y desde lo musical? Siempre has explorado en tu música y entre más discos quizás aparecen nuevas cosas o intereses.
Yo creo que lo clave de haber hecho varios discos para mí es que siempre estoy tratando de hacer el mismo disco. Puede sonar medio ridículo, pero es como “ya, ahora lo voy a hacer bien, voy a pasar al limpio lo que quiero decir y tengo en mente”, pero justamente cuando estoy grabando el disco siempre se tergiversa todo y lo que al principio quería finalmente no terminó siendo. A mí me quedó muy claro, y sobre todo desde este disco, que eso siempre va a ser así. Este disco es una aceptación de ese proceso, pero de una forma más orgánica.
— “UNDESASTRE” es un disco esencialmente latino. Tiene sonidos que van desde la cueca hasta boleros y cumbias, ¿cómo fue adentrarse aún más en ese mundo? Porque ya lo venías haciendo en tu discografía
Es un poco avanzar en las sonoridades y perdiéndose más. Antes, cuando me metía en las sonoridades, quería encontrar algo y nunca lo encontré. Ahora ese proceso lo acepté y dije “ya filo, me pierdo” y eso es lo mejor. O sea, por ejemplo, hacer una cueca y perderse en la idea de que cómo la hago, terminó en lo que finalmente terminó y fue súper entretenido porque pasé por muchas versiones de esa canción (La cueca del canario). Al principio era sólo guitarra y voz, después fue con una banda de cueca, después fue con el Feis6 de Corte Chilenero y terminé con el Torito Alfaro. Seguí haciendo versiones con otros personajes, pero al final quedó la del Torito.
Un desastre compartido
Compartir la pluma y hacer una composición en conjunto es algo que Gepe está explorando desde hace poco tiempo. Durante la creación del EP “Realismo” (2022) incursionó por primera vez en este método de trabajo. De ahí salieron participaciones de compositores como Raquel Sofía (Lasso, Juanes, Ha*Ash, Danna) y El David Aguilar y los productores Pablo Stipicic y Nico Cotton.
En el caso de “UNDESASTRE” (2024), si bien hay un importante grupo de canciones compuestas solo por Daniel Riveros, en los créditos también aparecen nombres como Miguel Molina, Marcelo Cornejo (Maco), Pablo Stipicic y Gianluca. Este último está ad portas de lanzar su próximo disco, “El último romántico”, donde mostrará una faceta distinta a lo estrictamente urbano.
Consultado al respecto, Riveros afirmó: “Me sirvió mucho para relajarme, me sentía aburrido de componer solamente yo porque no siento que tenga un lenguaje musical tan amplio”. Además, agregó que “haberme relajado con eso me permitió hacer canciones yo solo también de vuelta y entretenerme con eso, como fue el caso de noche D sol, Paloma y Vivo. Ese descanso y el compartir con el resto, me ayudó también reencantar conmigo mismo”.
Fotografía por Hilda Pellerano.
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El décimo álbum del hombre de Fruta y Té incluye colaboraciones como el mexicano Rubén Albarrán (Café Tacvba), la colombiana Monsieur Periné y el cantautor uruguayo Juan Wauters, además de los chilenos Torito Alfaro, Movimiento Original, Belencha, Cristián Heyne, Gabriela Arcos y Mon Laferte.
Respecto a esta última, cuenta que sólo la ha conocido dos veces. La primera de ellas ocurrió entre los años 2012 y 2013 cuando la premiada cantautora viñamarina llevaba poco tiempo en México. Incluso, visitaron juntos las históricas pirámides de Teotihuacán. “Lo pasamos la raja. Ella todavía no sacaba los discos que lanzó luego y fue lindo conocernos ahí, teniendo en cuenta el monstruo musical que es actualmente”, recuerda.
— ¿Y cómo se dio la colaboración con Mon, “BOLERo LIBRA”?
Habíamos compuesto esta canción con Miguel (Molina), yo pensando en Portishead y hacer una canción como en trip-hop. Después se me ocurrieron referencias como de la Luz Casal y de la música más oscura, como del amor roto, y en el mix justo la Mon sacó la canción “Tenochtitlán” y me hizo sentido que pudiera participar, porque la intención era similar. La invité y felizmente accedió e hizo una de las cosas más lindas que he visto de alguien que colabora conmigo, que es que me mandó la canción cantada entera y no solo su parte.
En el año 2022, Gepe participó como coach del programa de Chilevisión, The Voice Chile: El Regreso, donde tenía la misión de reintegrar a un participante a la competencia. Dentro de la fila de las concursantes se encontraba Gabriela Arcos, quien destacó por interpretar temas de la escena indie chilena como Coraza de Nando García y Cuántas Veces de Martina Lluvias.
El flechazo fue inmediato, rememora Daniel. “Nos sentimos cerca en ese programa. Todos eran de una línea y nosotros somos más de otra y congeniamos mucho, como tener onda con alguien. Además de eso, Gabriela canta hermoso y creo que lo sabe, pero no lo explota, me encantaría que se la creyera un poquito más. Pero cada uno con sus tiempos y soy súper fan de ella”.
Con el tiempo cultivaron una amistad que se plasmó en “Mastícame”, último track del nuevo disco de Gepe. “Nos habíamos juntado a echar la talla y tenía esta canción a medio andar y para variar un poco la melodía la invité a ella y la hizo propia. También es una colaboración doble con Juan Wauters, que es de mis artistas favoritos. Son dos artistas súper libres y están juntos en una canción mía”, señala.
Fotografía por @ferriqh.ph
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El reencuentro con el Caupolicán
El próximo 7 de diciembre, Gepe se reencontrará con un escenario que lo ha visto crecer como artista: el Teatro Caupolicán. Y justamente este concierto, además de presentar oficialmente su nuevo disco, significará una celebración a sus 20 años de carrera.
Este 2024 se cumplieron dos décadas del estreno de El brillo que tiene es lo humano que le queda, primer y único disco de Taller Dejao, proyecto que lideró Daniel junto al bajista Javier Cruz antes de comenzar con su carrera solista.
“Me encanta el Caupolicán, creo que es de los buenos lugares de Santiago para escuchar y ver conciertos”, cuenta el músico sobre el imponente teatro de calle San Diego. “Más allá de hacer un énfasis en algún disco en particular, no va a ser un concierto de lanzamiento en las que tocamos las 14 canciones del disco nuevo y el resto de otros lados. Las canciones nuevas estarán mezcladas con las no tan nuevas y así vamos a dividir el show en cinco momentos: folclórico, pop, acústico, bailable y algo más”, adelantó.
Las entradas están disponibles a través de sistema Puntoticket.
