Reseña por Profesor Rayado | Fotografías por María Loreto Plaza
La icónica banda Los Jaivas, celebrando 60 años de carrera, llegó a presentarse a lo que sería su quinta participación en el Festival de Viña del Mar. Una ocasión en que no solo se tuvo la posibilidad de disfrutar de sus himnos, sino que también emocionar y celebrar tanta historia.
Juanita Parra empezó con el clásico ritmo andino, el público se enciende y suena Tarka y Ocarina. Sobre el escenario también se encuentra el resto de integrantes, conformado por los miembros fundadores Claudio Parra y Mario Mutis, así también Francisco Bosco , Alan Reale y Carlos Cabezas, quienes ya llevan más de una década en el legendario grupo. La guitarra eléctrica entró en acción y la energía de rock andino se hizo presente en un fantástico solo, mientras la sección rítmica de piano, bajo y batería van incesantes en el ritmo.
En esta misma canción, la cual se compone de tres partes (Diablada, Trote y Kotaiki) y que forma parte del disco El Indio (1975), pudimos apreciar la estética andina astral del grupo, la cual se hizo notar en las visuales como también en la ropa de los propios músicos. Eso es parte de la magia, saben llevar tanto en lo musical como lo visual estas imágenes que son parte de nuestra identidad.
En esta misma canción, tuvimos una sección donde los hermosos arpegios del piano de Claudio fueron acompañados de la adición de instrumentos de viento -como trutrucas-, para luego explotar en incesantes melodías. En ese instante, el bajo Rickenbacker atronador de Mutis también se hizo notar.
Es maravilloso pensar que en televisión estamos presenciando una extensa pieza instrumental, en tiempos donde la rapidez o inmediatez es ley.
Como si esto fuese poco, el tema también incluyó un solo de batería de Juanita Parra, quien privilegia por sobre todo llevar el ritmo y adicionar fills con brillantez para luego pasar al cierre con a una hermosa pieza de arpas y flautas.
Llegó el momento de hacer cantar a la Quinta Vergara. Suena la guitarra y piano para entonar una clásico: Mira Niñita. Mario Mutis lleva la voz cantante y se hace acompañar con el público del anfiteatro. Esta es una canción legendaria del catálogo, lanzado en La Ventana (1972), que fue performada por el grupo sin perder ni por un segundo la energía original, dando espacio para los clásicos solos de guitarra, piano y flauta.
Pasamos a otro clásico del catálogo jaivero con La Conquistada, también del disco El Indio. En esta canción cada músico brilla por su cuenta. Juanita adicionando diversos detalles en el fantástico groove que lleva la canción, como también el piano de Claudio haciendo embellecimientos y adicionando notas con una velocidad impresionante. Ahí nos damos cuenta que en la dirección de televisión privilegia por sobre todo mostrar al grupo y en menor grado a los presentes, como por ejemplo, a una emocionada alcaldesa Macarena Ripamonti. Y no es para menos.
Los animadores entran para felicitar al grupo y recordar los orígenes viñamarinos del grupo, el cual cuenta con 60 años de historia. Así el público les pide la gaviota de plata, que la reciben con mucha emoción.
Luego, mientras Juanita contaba su primera experiencia como baterista en la Quinta Vergara, de pronto suena el público gritando por la gaviota de oro. Sin embargo, el grupo continúa su show con Pregón Para Iluminarse.
Mario Mutis pide los celulares que se enciendan para que la flauta introduzca la melodía principal. Carlos Cabezas (no confundir con el de Electrodomésticos) lleva la voz cantante llegando a los tonos altos con increíble facilidad. Y así pasan a la emblemática melodía de la guitarra donde permite al grupo jugar con saltos sincronizados.
Suena otro gran hit: Hijos de la Tierra, el cual es cantado con energía por el grupo y nuevamente Cabezas lleva la batuta con su voz. Y para rematar tenemos el himno: Sube a Nacer Conmigo Hermano, que el público de la Quinta recibió con tremenda emoción y se escuchó a coro en cada momento. La energía que se transmitió esa noche es particularmente especial, dando todo de sí para celebrar el legado construido.
Los animadores entran nuevamente para anunciar el homenaje que preparó la Municipalidad de Viña del Mar. La alcaldesa Ripamonti les hizo entrega de las llaves de la Ciudad Jardín. Es en ese entonces, mientras Mario Mutis agradecía el cariño, comienzan a oírse los primeros gritos pidiendo «platino».
Con esta efervescencia, la banda se prepara entornar una canción histórica: Todos Juntos. Con más energía que nunca el grupo celebra con el público sintiendo cada nota. Mientras Juanita lleva el ritmo que pasa la sección final de percusiones, los demás integrantes aprovechan de hacer participar a la audiencia.
Así, finaliza el show de la banda más importante de nuestro país. Pero es en este momento donde se hace historia entregándoles la Gaviota de Platino. Primera vez que se le hace entrega a un grupo chileno. Impresionante que sea recién ahora, pero quién más que Los Jaivas para ser los primeros. Sin duda recordaremos con cariño esta presentación del grupo. Si bien no podemos de dejar de echar de menos a varios de los miembros fundadores, al mismo tiempo tenemos esta energía especial que enmarca a Los Jaivas de una manera trascendental. Es eso lo que define a un grupo como legendario.
