En tres horas, dos grandes referentes de la música chilena brillaron cada uno por su cuenta en el céntrico recinto santiaguino. Los icónicos artistas sorprendieron con una variada selección de sus clásicos y lo dieron todo con sus disfraces de Halloween puestos.
Ellos partieron en plenos 90s, y ella, a mitad de los 2000s. Dos milenios distintos, dos décadas distintas, con estéticas y sonidos muy diferentes. Entonces, ¿cuál sería el sentido de escuchar en una misma noche “Luz de Piedra de Luna” y “Mataz”? En que ambos son indudables himnos alternativos de sus propias épocas.
Y eso es lo que se pudo presenciar el pasado 1 de noviembre, en el Teatro Coliseo. Javiera Mena y Lucybell, unidos en una fecha, en el mismo escenario. Un evento que nadie veía venir, y menos con el motivo de fiesta de disfraces. Muchas personas fueron con ropa casual, pero otros varios se atrevieron y lucieron sus tenidas de noche de brujas.
De magos y hechiceros; personajes de videojuegos como Los Sims; de series como Breaking Bad y su compañía fumigadora Vámonos Pest; al igual que vampiras y diablos, todos bailaron al ritmo del electropop de Mena, y los sonidos hipnóticos en conjunto con sensualidad hecha música de Claudio Valenzuela, Cote Foncea y Eduardo Caces.
Otra oportunidad en que le dijimos a Javiera Mena “que sí, que sí”
Quien partió la fiesta no podía ser otra joya que la mismísima Mena, que teletransportó 10 años atrás a los asistentes a otra era. Esta Otra Era (2014), el aplaudido álbum con hitazos que cumplió una década el pasado 28 de octubre.
Aunque “La Joya” no estuvo en su setlist, sí estuvieron gemas como el track homónimo, “Sincronía, Pegaso”, “Que Me Tome la Noche”, “La Carretera”, y el moderno electropop de “Espada”, como cierre de su show.
Con una presentación que inició pasada las 21:20, destacó en la salida al escenario con un sombrío desplante envuelta en una oscura capa y unos ramos de rosas en sus manos, para pronto cantar con toda la “Culpa”, y de inmediato el brillo de “Luz de Piedra de Luna”, lo único que se escuchó de Mena (2010) junto con “Hasta La Verdad”. Entre otros grandes hits, no podía faltar su versión de «Yo No Te Pido La Luna» de Daniela Romo.
Lució su nuevo material «Volver a llorar», que dejó espacio a la introspección. Y por otra parte, “Entropía”, en donde antes de su interpretación, lanzó al Coliseo las rosas con las que había entrado a cantar.
Ya finalizado el espectáculo, antes de sacar la foto grupal, Mena y su banda al despedirse bailaron al ritmo de “Amor Prohibido” de Selena (que sonaba de fondo en el recinto). Un momento curiosamente cómico que hizo otra jornada memorable para los fanáticos del pop, y sobre todo para los Menamorados.
Lucybell: la banda del Joker, Beetlejuice y Pennywise
Avanzan las horas de la noche. El reloj marcaba las 22:50. Las luces del teatro se tornan rojas. Era el momento de Lucybell, pero no estaban con sus prendas de siempre, sino que totalmente transformados y maquillados de personajes de películas. Un Joker en la voz y guitarra (Claudio), y un Pennywise en el bajo (Eduardo). Mientras tanto atrás, un Beetlejuice (Cote) en la batería.
Decidieron partir con lo nuevo, y tocaron “De Este Amor No Sabrás Huir”, un sencillo lanzado hace aproximadamente un mes para luego irse dos décadas atrás con “Sálvame La Vida” de su álbum Lumina (2004). Así también deleitaron con el clásico “Hoy Soñé”, pero antes de entornarla, Claudio se tomó literal lo de “por cada risa que te debo” de sus versos principales e imitó la trastornada carcajada del Guasón, fiel al personaje.
De pronto se apoderó el ruido rockero de “Sembrando En El Mar” de su disco homónimo, para seguir con “Tu Sangre”, con la misma destreza en vivo que en su material Sesión Futura (2001). Agradecer que Claudio mantiene su voz, pues le da su toque a la pieza.
Posteriormente, una composición inédita, estrenada en su paso por el Teatro Municipal, sorprendió a quienes no veían a Lucybell desde hace buen tiempo: la suave y peculiar sonoridad del tema “Pez Sin Auxilio”, grabada en su Sesión 3000 que aún no está disponible en ninguna plataforma de streaming.
Así, continuaron con vibras lentas pero con luces más tenues. La sensualidad se tomó el escenario y un característico Claudio juguetón interpretó su emblemática “Mataz”, acercándose mucho más al público y moviendo su corbata de Guasón. No está demás decir que además se sacó los icónicos pasitos de baile del popular personaje, y que “Cuando Respiro En Tu Boca” y “Mil Caminos” cerró la jornada llena de coros y aplausos.
Javiera Mena y Lucybell reafirman su posición de ser de los proyectos más destacados dentro de la música alternativa en nuestro país. Entre ambos han brindado a Chile casi 30 años de grandes temas. Lo que sucedió en el Coliseo solo es una muestra más de sus vastas trayectorias que siguen en pie, y eso, es notable.