Hasta ahora no pescaba mucho a Ases Falsos. Si bien encontraba que algunos temas tanto de Juventud Americana y Conducción eran decentes, nunca fueron una banda que me interesara en lo personal. Una de las cosas que no me convencía era el sonido y al parecer ellos no estaban tan convencidos, es por ello en este disco fue grabado de manera análoga y Cristobal Briceño pasó las manos de la producción al guitarrista de la banda. Y el cambio se nota muchísimo.
Salió el viernes recién pasado el disco llamado “El Hombre Puede”. Por lo visto el título fue entre medio impuso en el momento de decidir la portada del disco y a decir verdad calza perfecto con las declaraciones de Briceño acerca del feminismo. Pero esos son detalles ¿no? Hablando del álbum, realmente estoy sorprendido, no esperé que saliese un disco tan brillante como éste.
El disco empieza con un balazo de track llamado “Chakras”, el cual es en una idea super punk rock ya que es muy breve (no llega a los dos minutos). Es casi como Ramones, no demasiados acordes y coros pegajosos. Llama la atención la precisión de la batería el cual es nuevo en la banda y el tipo es fenomenal. No es de esos bateros hipertécnicos, pero tal cual como Ringo, tiene onda y hace los cambios adecuados.
Luego aparece el tema “Gehena” el single que tiene un videoclip de una onda bien lo-fi, que en lo sonoro me recordó bastante a The Strokes en su primera época en las guitarras y la intervención del bajo. Igualmente, las melodías de la voz van orientada a esta idea mucho más popera y emocional. Y después de ella está la canción “Sal de ahí” la cual aplica una idea similar pero menos intensidad en las guitarras.
Y luego pasamos a otro temazo llamado “Subyugado”, el cual tiene esta onda media jamaiquina en el ritmo. La voz de Briceño es excelente en esta, jugando bien con su registro vocal. En este como en las otras canciones del álbum las guitarras tienen una potencia a lo Weezer de sus mejores épocas, una influencia absolutamente clara en el cómo suena este disco.
Después sigue otro punto alto, “Más se fortalece” es de esos temas que son “baladas” pero tienen un riff principal brillant. Las letras de este disco tienen una imaginería muy adolescente lo cual podría molestar a más de alguien porque los integrantes de Ases Falsos ya bordean los treintitantos, pero lo tomo de esa jovialidad que muchos artistas buscan como fuente de inspiración. Y resulta ya que apunta perfecto al público que escucha esta banda.
Tanto como en “Fría”, la cual es por lo que veo una oda a la cerveza, como también en “Mucho más mío” me llama la atención el uso de arreglos en los teclados que le da una onda media setentera. Y estos son otros de los puntos altos ya que es donde se percibe de mejor forma esta dualidad entre lo pop y rock.
“Antes si ahora no” y “Creo que no creo” vuelven a esta idea mucho más beatlesca con añadidura de distorsión. Otra demostración de la gran capacidad de crear grandes canciones redonditas que se percibe en este disco. Ases Falsos se están transformando en unos verdaderos artesanos del pop.
Y el álbum finaliza con “Trato hecho”, una canción que sin dudas está dedicada a la marihuana (pero de una forma mucho más poética claramente), la cual es de esas canciones que van de menos a más en el sentido de intensidad y termina con toda la banda tirando toda la carne a la parrilla, como un preciso final.
Este disco es fantástico, candidato a disco a uno de los discos del año. “El Hombre Puede” es realmente adictivo, he estado escuchándolo todos los días al menos una vez. En términos de sonido es perfecto. Además, es de esos discos en que cada canción es un potencial single. Para mí es lo mejor que han hecho, dieron muchos pasos en varios términos. Realmente Ases Falsos la hicieron, seas fan de ellos o no escuche el album mijo.