El fundador del Teatro Aleph en 1960, falleció hoy en Francia, país que lo acogió hasta ahora luego de exiliarse de Chile.
La Ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés, entregó sus condolencias por Twitter. “Un triste día para el teatro con la partida de Óscar Castro. Intérprete, director y gestor que dedicó su vida al teatro en Chile y el extranjero, con un compromiso inclaudicable. Un abrazo a su familia, amigos y a las distintas generaciones que guió”, escribió.
Óscar «Cuervo» Castro, formado como periodista en la Universidad Católica, desde su juventud estuvo clara su pasión por las tablas. Como estudiante secundario del Instituto Nacional, conformó un grupo de teatro con alumnas del Liceo Nº1, en el que también participó la ex presidenta Michelle Bachelet. Eventualmente esto conformaría el Teatro Aleph, ubicado en una casona de Lastarria, la que participaban célebres personalidades como Eugenio Dittborn y Héctor Noguera.
Su compromiso social y su vínculo con las artes lo llevaron a exiliarse después del Golpe Militar del 73, mismo año en que fue apresado y llevado al campo de prisioneros Tres Álamos junto a su hermana. Allí incluso funda un grupo de teatro con otros internos. En este mismo contexto, su madre y su cuñado María Julieta Ramírez y Juan Rodrigo “John” McLeod, respectivamente, también fueron detenidos y enviados a Villa Grimaldi, sin embargo, ellos no regresaron nunca.
Cuando Castro es liberado, en 1976, elije a Francia como su nuevo hogar, país en que refunda el Teatro Aleph y, en el 2018, es nombrado parte de la Orden de la Legión de Honor. A la distancia, participó en las adaptaciones de obras literarias de Luis Sepúlveda, Orlando Lübbert, Claude Lelouch, Pierre Richard y Thomas Gilou. Sus trabajos más destacados fueron en Que hacer de Raúl Ruiz y Nowhere de Luis Sepúlveda, entre otros títulos producidos en Francia.