Luego del lanzamiento de su primer disco “Kaos” (2020), el artista se ha convertido en una de las figuras más destacadas en la escena urbana penquista, con un estilo que él mismo bautizó como reggaetón conceptual. Actualmente, se encuentra trabajando en su segunda placa discográfica de la mano del sello South Music.
Foto por Zima
El escenario urbano de Concepción se ha ido formando poco a poco como una escena fuerte, variada y llena de talento en la que muchxs artistas se han atrevido a incursionar. Uno de ellos es Diso, un joven oriundo de Chiguayante que en los últimos meses se ha ido conformando como una de las figuras más prometedoras de la nueva ola del reggaetón.
Si bien “Oye” es un éxito en reproducciones, el camino que recorrió para levantar su proyecto musical estuvo acompañado de decisiones, personas y, sobre todo, momentos en su vida que, aunque a primera vista parecían pequeños e insignificantes, lograron encaminar a Mauricio hasta convertirse en Diso.
Primeros pasos como artista experimental
Mauricio Gutiérrez (23) encontró la música entre discos de rap de los 2000s y amigos de la infancia. Tenía 13 años cuando vendió un Play Station 2 para comprarse su primer micrófono, con el que pudo cantar en dos conjuntos de hip hop que tuvo bajo el nombre de “2112 Crew” y “Lírica Urbana”, antes de llegar a su escenario principal: las batallas de freestyle que frecuentaban el centro de Concepción. “Una vez participé y quedé segundo. Fue la primera batalla de mi vida”, recuerda.
Sin embargo, fue la plataforma Soundcloud la que lo llevó a abrir sus horizontes a la música chilena, lo que le permitió entender el mundo desde otra perspectiva y explorar otros sonidos.
“Me di cuenta que había mucho cabro haciendo su transición de rap a música experimental, como lo que hacía Ceaese antes, en KSN FAM. Ahí me empecé a influenciar de a poco, a escribir otro tipo de mensaje. Salí del rap y de hablar de la calle, y entré más a escribir sobre lo que pensaba yo y mi mensaje hacia el mundo”, dice.
En este punto aparece Barraseba, productor de la zona con el que grabó sus primeras canciones. “Hicimos un tema súper experimental que se llamaba “Sanag”, que era “ganas” al revés. Ese fue el mejor tema de mi vida, por la letra más que nada, fue un libro de poesía para mi. Después vino “Adane”, porque el concepto era “ganas de nada” y lo quería figurar en dos temas. Era medio lunático para el tema de las letras”, cuenta quien en su tiempo libre se dedica a descubrir música nueva.
Dlafixa: dúo complementario
Mientras Mauricio iba en su segundo año de Trabajo Social, en 2019, también componía canciones como Dlafixa, dúo musical que formó junto a Fes$Tripp, otro artista de Concepción que recién había lanzado su primer disco.
“Korte Hollywood” y “Solá” fueron los primeros productos del conjunto, y esta última en palabras de Gutiérrez, jugó un papel fundamental para sentar la base de lo que sería Diso en un futuro: “Fue la primera cercanía que tuvimos con la gente de Conce y de afuera, y gracias a eso, yo concreté colaboraciones con productores de Santiago. También tuvimos los primeros eventos en vivo”, dice quien en febrero pasado cerró un show de Ceaese en Concepción, junto a Dlafixa.
“Fue súper importante compartir escenario con él. Un artista que yo cuando decidí empezar a experimentar rap a urbano, fue por su influencia y años después estar compartiendo escenario con él y ahora vamos a tener una colaboración… es loco”, cuenta sobre esta última presentación en vivo antes del confinamiento.
Por entonces, todas las puertas que comenzaron a abrirse motivaron al artista oriundo de Chiguayante a salirse de la universidad en 2020 para hacer lo que realmente quería y nunca se permitió de lleno: dedicarse a la música profesionalmente.
“Me iba a matricular en 2020, pero me empezaron a aceptar más en la música, tenía mucha más llegada y todos me decían ‘hermano dale’, que en verdad eran cosas que yo sabía, pero que no me las permitía, así que no lo pensé dos veces y me salí de la carrera, sin preguntarle nada a nadie. Me eché a varia gente encima, entre ellas a mi mamá”, relata el autor de “Ser”.
¿Qué te dice tu familia ahora?
“Mi mamá y mi hermana me escuchan. Yo siento que a mi mamá le va a costar verme libre en la música, por sus preocupaciones y por las aspiraciones que siempre tienen los papás sobre sus hijos, que por lo general son estudiar y trabajar, tener algo seguro. Igual siento que va a ser un trabajo mío darle a entender mi misión y que vea que soy feliz con lo que hago. Últimamente me lo ha hecho, ha visto que es super importante para mí, que me lo tomo en serio. Para mi tomar el micrófono es una responsabilidad súper grande”.
Pandemia y evolución del mil por ciento
La importante decisión vino de la mano con varios cambios: las visitas al estudio de grabación aumentaron, los proyectos personales se formalizaron y el trabajo en la distribución musical e imagen se puso manos a la obra, todo lo cual siguió su curso aún en medio de la pandemia.
“Lo que más me chocó fue el estar encerrado. Admito que no lo respeté mucho, salía y me juntaba con mis amigos al principio, pero después le empecé a tomar más el peso porque vivía con adultos mayores”, cuenta sobre los primeros días de confinamiento voluntario.
Sin embargo, el artista agrega que todas las emociones repentinas que experimentó en esos días fueron súper favorables, ya que según él, logró sacar algo bueno de ello: “Si yo te hablo como artista y como músico, siempre me van a favorecer todas las mareas en contra. Trato de recibir el mensaje, interpretarlo y después finalizarlo en mi mismo, ahí por lo general sale alguna canción”, dice.
Y tenía razón, ya que justamente fue en 2020 que su carrera musical se pegó un salto y tuvo una evolución en oyentes y números, lo que se acrecentó aún más luego del lanzamiento de su primer disco ‘Kaos‘ (2020).
El efecto mariposa
Mezclado y masterizado por Barraseba, ‘Kaos’ empezó a trabajarse de lleno en mayo pasado y en julio ya estaba terminado, proceso que Diso califica como “paulatino, pero rápido”. A las 7 canciones ya compuestas, se les sumó “Eterno”, “Oye” y “Duele”, escritas en 2019.
Sobre el concepto que engloba la placa, el cantante siente que “desde que decidí dar este paso de poner todo de mi en la música, sin querer profesionalizarlo ni nada, pasaron puras cosas buenas: conocí a Diego, llegó el disco, subieron los números, llegaron más oyentes. Siento que todo ese efecto mariposa se cumplió”, expresa.
¿Y cómo se ve reflejado el caos?
“El efecto mariposa es la teoría del caos y dice que el aleteo de una mariposa puede causar un huracán en otra parte del mundo, entonces en eso va, en lo caótico que puede ser y, al mismo tiempo, sanador, porque el caos no siempre viene en una forma negativa”.
A eso, se le suma un cúmulo de procesos internos que venía pasando el cantante que tuvieron como trasfondo la crisis social, la pandemia, el encierro y el nuevo ritmo de vida. “Quise trabajar ese mismo caos que estaba surgiendo en mí mismo, lo quería reflejar en un tracklist de canciones que me cerraran todo eso y poder decir ‘voy a dejar atrás todo este caos para tener un nuevo comienzo’”.
¿Qué ciclos estás cerrando con Kaos?
“El de mi presentación como artista experimental. Ahora estoy formando mi propia identidad para generar una nueva ola de música y mostrar lo que hago, que es reggaetón súper conceptual, mucha emoción y cero misoginia. Es como, como fue el ciclo de un Diso que rapeaba, que se puso a experimentar en la música urbana y ahora está en constante búsqueda de identidad”.
Este primer trabajo lanzado hace ya seis meses tuvo, sobre todo en la escena penquista, una gran aceptación y se mostró muy entusiasmado. “Aquí (en Concepción) es poco lo que se consume en música local y harta gente empezó a consumir nuestra música. Se hicieron varios eventos y ahora cada vez se hacen más, y es gracias a todo el trabajo que se ha estado haciendo en la música urbana local. Ya se puede hablar de la industria musical de Concepción”, dice.
Escena urbana penquista
Con el objetivo de darle un piso firme a la profesionalización de proyectos musicales de la escena urbana de la zona, nace el sello penquista South Music en abril pasado a manos de Diso, junto a los hermanos Barraseba y Diego Barra, su actual director.
Sobre el escenario urbano de la zona, el músico dice “lo veo disperso aún, pero no le echo la culpa a nadie como artista ni a nadie como gestor de eventos. Creo que nadie se ha atrevido a golpear las puertas correctas, porque a nadie le gusta golpear puertas, a todos nos da vergüenza un poco”.
¿A qué te refieres?
“Siento que faltaba lo que estamos haciendo un poco nosotros, que es ponerle un poco más de profesionalismo a la cosa. No podemos poner el el cien por ciento, el otro cincuenta es de las personas que nos escuchan, pero es responsabilidad de nosotros ir dándole sentido a esto”.
Después del caos, la calma
Además de la consolidación de South Music a nivel regional, una de las metas de Gutiérrez es poder vivir de su música. “Yo creo que esa es la meta de cualquier artista, querer que su arte más que valorado monetariamente, sea visto, pueda trascender en una persona, pueda figurar un cambio, una duda, una pregunta. A veces hay gente que se sienta a escuchar mi música y la analiza, eso es lo que más me gusta de hacer música”, comenta.
Si pudieras sacar una colaboración con cualquier artista hoy, ¿quién sería?
«Rels B, pero sería como otro rollo. Tengo igual aspiraciones de hacer reggaetón con otra gente, o sea, más que aspiraciones, sé que lo voy a hacer, algo me dice que va a pasar. Ahora, si tú me preguntas por quién me inspiró a ser hoy día, lo he pensado harto y creo que soy yo mismo. Más que la música del resto, siempre ha sido mirarme al espejo. No pretendo ser como algo o como alguien, sino llegar a un punto de sentirme plenamente feliz con todo lo que estoy haciendo y poder decir ‘fui trascendente’».
¿Sientes que estás cerca de eso?
«Siento que en el mundo igual debe ser complicado trascender, porque pasa por muchas otras cosas, pero para las personas que me importan, ya lo he logrado».
Actualmente, Diso se encuentra trabajando en su próximo disco, para el cual habrán tres o cuatro singles con videoclips a modo de adelanto, además de algunas colaboraciones nacionales importantes. ‘Kalma’, será su segunda placa discográfica, nombre que le hace justicia porque, en palabras del artista, “después del Kaos, viene la Kalma”.