«Jesús», la segunda película de Fernando Guzzoni, va por su tercera semana en cartelera de CineHoyts, Cine Arte Alameda y Cine Radicales.
«Es un largometraje realista, crudo, violento, envuelto en un imaginario hipermasculino de personas alienadas, que no se conectan del todo porque no saben cómo hacerlo. También es la historia de un niño que está en la transición a la adultez, que aún está descubriendo quien es y quien quiere ser», señala el sitio web Pousta sobre esta película disponible desde el 26 de octubre en cines.
La cinta es protagonizada por Nicolás Durán, actor que a sus 22 años tiene una interesante filmografía y recientemente fue catalogado como el Actor Revelación en Premios Caleuche 2017 y «Mejor Actor» en el Festival de los Países del Sur del Mundo en Buenos Aires.
Paralelo a este estreno, el artista también está presentado su proyecto musical Daddyblue, que hace unas semanas estrenó su primer sencillo, «Closer», producido -al igual que todo el disco- por Enzo Massardo.
Conversamos con él sobre ambos proyectos y esto nos contó…
¿Cómo llegaste a protagonizar esta película de Fernando Guzzoni?
Antes había protagonizado una película que se llamaba “The Stranger”, que la dirige Guillermo Amoedo y la produce Eli Roth. Guzzoni me envía un mensaje por Facebook, un día que estaba trabajando en Sobras (productora de Sin Filtro, Que pena tu vida, etc) como traductor y administrador web. Me dice que estaba haciendo su segunda película, que buscaba a su protagonista, que había probado con varias personas y ninguna había funcionado lo suficiente. De un día para otro me tuve que aprender lo que tenía que decir y al día siguiente fui donde estaban haciendo el casting. Fue una conexión inmediata con Guzzoni, una onda de amigos muy brígida. Me llamó en la noche de ese mismo día y al otro día ya estaba en su oficina confirmando mi participación en la película.
Tu papel en “Jesús” juega mucho con la sexualidad, sientes que en ese sentido el público chileno es muy conservador. Leí por ahí que incluso se pararon de sus asientos al ver algunas escenas…
Eso fue en España, era un festival gigante, donde la gente si no le gustaba la película se paraba y se iba. En varios países pasó que la gente se iba porque las escenas son muy fuertes, como las de violencia, las de sexo, ya se hace típico. De hecho, acá en la premier igual se fue gente. No creo que Chile sea un país conservador, lo que pasa es que todavía hay mucha gente que mantiene esa cabeza más hermética y privada, no quieren ir a ver realidad, en verdad quieren ver algo que los saque de su realidad. Creo que está un poco satanizado el cuerpo y el sexo, cosa que me parece absolutamente ridícula porque sin el sexo no estaríamos acá.
¿Cómo definirías tu personaje en la película?
Jesús es un niño en busca de su identidad.
¿Te sientes reflejado en algunos aspectos de “Jesús”?
Somos bastante distintos la verdad. Yo soy mucho más extrovertido, explosivo e histriónico, en cambio Jesús es más retraído, se guarda las cosas. Lo que sí compatibilizamos es que los dos pasamos por la misma edad: 18 años, medio perdido. A mí me pasó que desde los 14 a los 17 años me destruía, me emborrachaba, me drogaba al punto de quedarme dormido en el pasto, vomitar, ese nivel. Pero eso es muy de adolescente, quién no ha sido Jesús alguna vez.
En la película también incursionaste algo en baile, que no era lo que tú estabas acostumbrado a hacer, ¿cómo ves esos desafíos que te pone Guzzoni?
Es lo mejor que me puede pasar como actor, que me den desafíos, que me den personajes distintos a mí, que haya tenido que aprender a bailar K-Pop, que es algo muy difícil y absolutamente distinto a lo que yo estoy acostumbrado a escuchar. Fue un excelente desafío, me encantó bailar en la película, me encanta verme bailar porque tiene bastante montaje.
¿Para esto tuviste que familiarizarte con algún grupo de K-Pop?
Sí, con un grupo en especial que se llama Rebirth que son los dancecover oficial de EXO en Chile.
¿Cómo ves el panorama del cine chileno actualmente?
Cada día creciendo un poco más, cada vez tenemos historias más frescas, directores y actores más jugados, estrellas que están en ascenso, yo creo que Chile será un lugar donde se va a refugiar el buen cine, como lo es Francia.
Leía por ahí una de las primeras películas que te marcaron fue “La Máscara”, ¿te atreverías alguna vez incursionar en la comedia en un papel más protagónico?
Por supuesto, ya hice comedia en Sin Filtro. Me encanta la comedia, empecé viendo películas de este género, mi película favorita de Nicolás López es “Promedio Rojo”, y cuando era pendejo eran American Pie, Road Trip, Porky’s, esas películas. El tema del sexo estaba muy presente, que cuando eres pendejo hablan de las tetas, los culos, eso me marcaba caleta porque todos estábamos en la misma. Entonces podríamos decir que comencé con la comedia sexual, “La Máscara” fue la comedia blanca que me hizo querer ser actor, pero siento que las comedias sexuales definieron mi generación.
En tu corta carrera te ha tocado participar en series, cine y televisión, ¿te gustaría incursionar en el teatro por ejemplo?
Sí, cuando era pendejo participaba en teatro, pero en el colegio. Ahí caché también que tenía algo porque siempre me daban los papeles protagónicos y los profes me ponían buenas notas. Siempre me subían las notas cuando no tenía nada que hacer en matemáticas. Me encantaría hacer teatro en algún momento, pero para el teatro hay que tener un cierto tipo de expresión que es absolutamente diferente a la que uno tiene cuando está en frente de una cámara, donde cada detalle es mínimo. El teatro es grande, abierto, tus pasos son grandes; en cine tus pasos pueden ser ínfimos pero la cámara lo puede captar.
Junto con este estreno, también está el lanzamiento del primer single de tu proyecto musical Daddyblue, porque primeramente eres músico, participaste en Factor X Chile cuando chico y, paralelo a ello, iniciaste tu carrera de actor. Cuéntanos sobre este proyecto…
Primero que nada, soy más cantante que músico. Daddyblue es el proyecto musical de mi vida, el que ha transmutado por un par de evoluciones bastante distintas y diferentes sonidos, diferentes tipos de conceptos, al fin y al cabo las letras se mantuvieron iguales y creo que eso es lo que hace importante que el disco tenga mi esencia.
Daddyblue habla un poco sobre mi rollo con la luz y la obscuridad, sobre la eterna lucha entre el bien y el mal. Toda la vida me he sentido guiado por una fuerza superior que yo llamo universo, Dios, padre, de todas formas, encuentro super chistosa la conexión que he tenido con Dios, con la imagen de Jesucristo como el primer libertador. A mí me pasa algo con eso, que me mueve desde muy chico y creo que eso es lo que me ha llevado a llegar a varias partes, porque uno tiene dos caminos en la vida. Y en este camino siempre he tenido a alguien que me está guiando, es súper extraño, sin sonar canuto ni católico porque esa hueá la odio; odio ese catolicismo porque muchas veces son personas ignorantes que detestan a los gays, que castigan un montón de cosas, que son los males de nuestro cuerpo. El sexo lo satanizó la Iglesia, yo no creo en esa basura, yo creo en un Dios que te ayuda a liberarte, en un hueón que está ahí para apañarte, que no te juzga ni te castiga. Para mí Dios no puede ser castigador, porque ese es un error humano. El castigo no es castigar a tu hijo, eso no es divinidad.
Daddyblue está muy conectado con eso, de hecho, este disco habla un poco de eso a través de los videoclips y las canciones, ya que todas están conectadas, es un disco conceptual que se llamará “Sex, Sin, Santiago” y cuenta la historia de mi evolución, de pasadas etapas cuando estaba en un lado obscuro lejos de la luz, de cómo me sentí arrastrado hacia ese mundo y como la fui a buscar (la luz) en este inframundo.
¿Y con quién estás trabajando en este proyecto?
Con Enzo Massardo, el mismo que produjo la primera canción de Nick Bolt: “Peligroso”.
¿El tema central de Sin Filtro?
Claro. Trabajo con él (Enzo) porque es un genio en todo el disco, estamos en proceso de terminarlo; pero ya lo tendríamos listo para enero, que es la fecha tentativa para lanzarlo. Con Enzo nos entendemos perfectamente, él entiende para donde quiero llegar, entiende cómo explicarme cuando me paso de la raya y quiero llegar cosas hollywoodenses, porque valen un millón de dólares y que no tenemos esos recursos para dejarlo sonando tal cual. No tiene nada que envidiarle a ningún otro productor, por eso estuvo invitado a Los Ángeles hace poco a una feria de música.
¿Será un disco completamente en inglés al igual que el single?
Sí, todo el disco y el concepto es en inglés
También es un idioma que manejas de forma muy fluída, de hecho protagonizaste una película totalmente en inglés («The Stranger»), ¿qué tal esa experiencia?
Me fascinó, llegué al inglés desde muy chico viendo películas, porque mi vieja para pagarme las buenas notas me compraba VHS. Antes tú no podías seleccionar español o inglés en las películas, o la comprabas en español o en inglés con subtítulo, entonces le empecé a pedir a mi vieja que me comprara películas con subtítulo, me gustaba ver a los actores como ellos hablaban. De ahí empecé a aprender, uní una palabra con la otra, no sé cómo lo hice pero a los 11 años ya hablaba inglés.