Se acercaban las 21 horas y comienza uno de los shows más esperados de la jornada. Sentada en una silla, la cantante de 74 años comienza su presentación acompañada de un desfile de artistas chilenos que la admiran.
Nadie más que ella se podía dar el lujo de comenzar de nuevo una canción, retar al sonidista y tirar la talla a sus invitados, porque es la Incomparable y una de las compositoras más trasgresoras y geniales de nuestra historia musical. El primer tema fue «Compromiso», cantado junto a Javiera Parra. Cabe destacar que la nieta de Violeta Parra versionó esta canción en su álbum «Corte en trámite» (1995), por lo que verlas a dúo tuvo un significado muy especial. Sin embargo, esta presentación se vio opacada, ya que Gepe -que en esos momentos estaba en el escenario Jorge González- aún no terminaba su show, por un problema de organización que atrasó todo el horario preestablecido.
Después de Parra vinieron más artistas como Rulo, Don Rorro de Sinergia, Álvaro López, Anita Tijoux y finalizó con la voz potente de Denisse Malebrán, con quien interpretó su gran himno «Baño de mar a medianoche». En ese momento, un silencio respetuoso se apoderaba del público del escenario Gato Alquinta, que miraba con admiración a la artista que está de a poco volviendo a las pistas tras un delicado estado de salud.
«Ese es el cariño recíproco que esperé por más de 60 años» dijo la autora de Dilo Calladito, mientras el público le gritaba «Ídola… Ídola».
Cómo no amarla si apareció en nuestra escena y cambió todos los estereotipos. Una mujer que a sus 19 años usaba pantalones cuando reinaba la falda, no le cantaba al amor tan cliché de los años 70′, hablaba del puré de papas y del deseo carnal. Versionó a Victor Jara y Violeta Parra en épocas de extrema tensión política. Por eso y muchas cosas más, hacen a Cecilia una artista única y como dice su seudónimo: una Incomparable.