«La agonía de Arauco» fue la primera película dirigida por una mujer en Chile, Gabriela Bussenius (1887-1975), pero se encuentra perdido desde 1917. Junto a la investigadora Mónica Ramón Ríos, Sotomayor reescribirá su guión.
En el año 2018, la investigadora Mónica Ramón Ríos (1978) entrevistó a la cineasta Dominga Sotomayor (1985), instancia en la cual salió el tema de Gabriela Bussenius y su película perdida.
La directora y escritora, ganadora del premio a Mejor Director en el Festival de Locarno por Tarde para morir joven, explica a Culto que “Gabriela Bussenius tuvo la oportunidad de hacer una gran producción y escogió un tema con resonancias políticas. Eso es muy bonito y significativo. Es alguien que, como todas las mujeres de la época, no tenía derecho a voto y que se las arregló para filmar una película con un argumento de cierta manera revolucionario e incómodo, donde se llega a cuestionar la propiedad de las tierras en la zona mapuche”.
En efecto, la trama de la película sigue la historia de una viuda burguesa que decide radicarse en el sur de Chile, lugar en el que conoce a un niño mapuche llamado Catrileo y, a su modo, lo adopta. Es más, como puntualiza Ramón Ríos, esta película tenía un contenido que incluso hoy sería tildado de polémico: «En el clímax de la película hay un cartel que dice: ‘Catrileo, no le dejes nada a los invasores, vuelve y quémalo todo'».
En otras palabras, las aristas contingentes de género, etnia y (des)colonización hace que la reconstrucción de esta película sea un hito dentro de la historia del cine chileno.
Se especula que la película original, que tendría 103 años, estaba guardada en las instalaciones de la compañía Andes Films, en el centro de Santiago. Sin embargo, de acuerdo a los registros históricos, durante un allanamiento el material fue desaparecido o destruido. Cabe señalar que el hermano de Gabriela Bussenius, Gustavo, ejerció como camarógrafo dentro de la compañía, y participó en la película junto al entonces esposo de Gabriela, Salvador Giambastiani. Durante años «La agonía de Arauco» se le adjudicó a él, pero la verdad es que su rol fue el de director de fotografía.
Si bien el guión original está desaparecido, la investigación de Mónica Ramón Ríos ha permitido saber que fue una producción de alta envergadura, grabada en distintas locaciones de Chile y subdividida en 38 capítulos. Ella tiene fe en poder recuperarlo, pero mientras está ausente, será Dominga Sotomayor quien atará los cabos sueltos.
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