Javier Poduje, Yaney Salgado, Renato Hidalgo, Vicente González y Juan Pablo Aravena integran Emisario Greda, la nueva banda del sello Quemasucabeza que en abril pasado estrenó su álbum debut «Anhelario».
La agrupación surgida de la evolución del proyecto solista de su vocalista, Javier (Pujem), nos muestra un pop suave y melancólico, lo cual nos recuerda demasiado a los inicios de Prehistöricos, Dënver o los recién separados Niño Cohete. Sí bien ya tenían un terreno ganado en el circuito under, hoy con un material concreto en sus manos podemos confirmar que será una banda que dará que hablar en un futuro cercano.
«Anhelario» tendrá su lanzamiento el próximo 1 de julio en Sala Master, instancia en que también se presentará Alvaro Solar de Protistas. Es por ello que quisimos conversar con su líder y voz, Javier Puduje, quien nos contó más sobre este debut discográfico y el nacimiento de la banda.
Llama la atención el título, ¿cuál es la génesis de la palabra “Anhelario” -porque no existe en el diccionario-?
Había cachado una película que se llamaba “Suspiria” y teníamos ganas de ponerle un nombre que fuera una palabra inventada, pero que claramente se refiriera a otra. Y nos dimos unas vueltas y “anhelario” estaba bueno, porque el disco suena a eso. Viene de “anhelo”.
Este es su primer álbum como Emisario Greda, antes era Pujem, que más bien era un proyecto solista tuyo, ¿en qué momento decidieron cambiar el nombre y por qué?
Cuando hice el “Papel” (de Pujem), tenía la idea de que se iba a quedar como algo que no lo iba a tocar en vivo y si hacía una banda quería tener nombre de banda, porque “Pujem” es mi apodo. Entonces se cruzaron las cosas, comencé a tocar con una banda las canciones de Pujem, cuando caché que esa iba a ser la banda -la que al menos me quedaría harto rato-, preferí cambiarle el nombre al proyecto Pujem.
Al igual que “Anhelario”, ¿cómo llegaron al nombre de “Emisario Greda”? Leí que fue la combinación de palabras que buscaron en un diccionario…
Sí, más o menos. Lo que hicimos fue que anotamos varias palabras que nos gustaban, porque sabíamos que queríamos un nombre con dos palabras. Queríamos que no significara nada, así como Soda Stereo.
Si tuvieras que describir en una palabra cada integrante de la banda, ¿cuál sería?…
¿Yaney?
La mujer.
¿Renato?
El cocinero.
¿Juan Pablo?
El cinéfilo.
¿Y Vicho?
El gamer.
Entiendo que Renato tuvo un rol súper importante en la génesis de la banda, fue justamente “cocinero de la banda”…
Si igual él la formó, él la cocinó.
Fuiste el compositor de todo el disco, ¿qué quisiste transmitir en cuanto al contenido de sus letras?
No estoy seguro, yo creo que eso de transmitir algo no es intencional. Al menos en mi caso, hago una cosa y después que está hecho veo qué transmite, pero no hay una intención a priori. Creo que en general, hay una sensación melancólica y optimista.
Justamente te iba a decir eso, la melodía del disco es súper nostálgica, ¿hay alguna experiencia personal dentro de él?
Quizás la mayoría son cosas que pasaron, pero están como hechas en favor de la letra, las hago calzar y a veces cambio un poco la historia real, a veces exagero.
¿Escuchaste algunos discos para influenciarte?
No directamente, pero sí seguro que la música que me gusta me influencia, porque está ahí en mi cabeza.
¿Y qué música escuchabas en ese momento?
Escuchaba mucho Charly García (de hecho, ahora también) y Tame Impala (ahora no tanto, pero en su momento sí).
¿Cuál es tu disco favorito de Charly?
Creo que mi parte favorita de Charly son sus bandas. Probablemente La Máquina Para Hacer Pájaros y específicamente el “Películas” es el que me gusta más.
Ustedes son parte de un grupo de bandas que las han descrito como muy unidas entre todas ¿a qué crees que se deba eso?
Creo que los periodistas que empezaron a hablar y a escribir a estas bandas de esa manera, iban a esas tocatas. Que eran casas, tocábamos en el patio y estaban todas esas bandas; Emisario cuando era Pujem, Patio Solar, Niños del Cerro, todo ese grupo de gente metido y como que se cruzaba el carrete y la tocata. Era un ambiente diferente al de ahora.
¿Ahora sientes que es más masivo?
Sí, ahora es más grande, va más gente.
Pasaron de estar en sello Piloto, que es un sello súper independiente, a Quemasucabeza, que sigue siendo independiente pero un poco más masivo, ¿cómo ha sido trabajar con ellos?
Ha sido bacán, nosotros pensábamos que por ser una banda nueva no nos iban a pescar mucho, que íbamos a sacar el disco y nos iban a dejar botados. Y no ha sido así. Están haciendo cosas, moviéndose. Igual tiene sentido porque por ejemplo Piloto, como están recién partiendo, ellos tienen otros trabajos y tienen que encontrarse los tiempos para organizarse, es más difícil. En cambio, Quemasucabeza están ahí, viven de eso y es más rápido.
Igualmente ustedes lanzaron su primer sencillo bajo sello Piloto, después se fueron a Quemasucabeza
Lo que pasa es que nos cambiamos el nombre mientras estábamos en Piloto, entonces ellos nos dijeron que para que no fuera solo un cambio de nombre, decir “Ahora somos Emisario Greda y chao”, mejor sacar una nueva canción y así justificarlo un poco. Igual no sé si sea tan single en realidad, de hecho esa canción (“Gotas de Cristal”) en el disco la grabamos de nuevo, tiene otro sonido.
A propósito, ¿cómo fue trabajar con Felipe Castro en su grabación? Entiendo que hay un lazo con la ciudad natal de Renato
Sí, el Renato y el Juanpi son de Antofa y el Felipe también, iban en el mismo colegio, la mamá del Felipe iba a dejar al colegio al Juanpi. Se conocían de hace tiempo y ahora se encontraron en este contexto sin que lo supieran mucho. Yo conocí al Felipe cuando grabé “Los Movimientos” con Patio Solar, después de un tiempo quisimos grabar algo y terminó siendo el “Anhelario”, entre esa conversación se reencontró con los dos chicos.
El próximo 1 de julio van a lanzar su disco en Sala Master, ¿qué adelantos podrías darnos al respecto? ¿Habrán invitados?
Sí, va a estar Álvaro Solar de Protistas… Nos estamos preparando, ensayando harto, tenemos nuevos planes, deberíamos sonar mejor.
Después de este lanzamiento me imagino que piensan tocar más, salir a regiones…
Tocar lo más que podamos dentro y fuera de Santiago. Finalmente, ese fue el objetivo del disco: poder verse más todavía, con algo bajo la manga. Porque de repente vamos a tocar y la gente donde no conoce las canciones pasamos un poco colados, ahora me imagino que van a ir a vernos a nosotros.
Fotos por Lucy Valdés