Sabina Gabriella Angela Odone Di Monte, es el nombre completo de nuestra nueva entrevistada: Sabina Odone, a quien la conocimos años atrás tras su paso por el experimental grupo pop Supernova a inicios del 2000.
Fue Koko Stambuk y Cristian Heyne los productores que descubrieron a esta joven cantante, quienes no quisieron que pasara por la etapa de casting y la incluyeron de inmediato en la segunda generación de este trío de chicas.
Pero de eso ya han pasado más de diez años, tras la disolución de la banda, Odone siguió en el camino de la música dejando de lado el pop más de fábrica y entrando a la beta del underground de raíz folclórica, compartiendo con compositores como Chinoy y Manuel García.
«Sentencia de amor imposible» (2008) y «Vírgenes Rotas» (2011) fueron los discos que lanzó en su carrera, previo a lo que nos convoca hoy. «Déjenme en Paz» se titula su nuevo disco, donde nos muestra su madurez y un cambio musical más notorio, pasando desde charango a la guitarra eléctrica.
Hablamos de eso, de su evolución musical, de música chilena y de su paso por Supernova a continuación…
Y en cuanto a la imagen, es enfrentar a la adultez, ya tengo 30 años y ha sido todo un proceso en mi vida, como de sentir que ya eres un adulto. Los treintas de ahora no son los mismos de antes, la adolescencia siento que se alargó mucho más; pero si es enfrentar esa madurez y ese sentimiento de que ya eres una mujer.
– Las canciones son totalmente mías, letra y música, siempre las canciones parten en mi casa o en el living, con mi guitarra. Las trabajé con Carlos Colucci, quien es el productor de este disco, y luego ya vinieron los músicos a tocar y a embellecer las canciones.
– Sabes que surge espontáneo, hay días que estoy con mi guitarra y salen cosas, a veces no muy buenas, una que otra prendida, y después cambio. Pero de repente hay un momento en que agarro la guitarra y salen las canciones, es muy del momento. Pero mira, cuando sale una canción es cuando le sale de una, y la letra después se va trabajando más, dándole arreglos…
Y el contenido de las letras, en este disco específicamente, es más de vivencias personales o creaciones al azar, del momento. Porque igual canciones como “Un Perro Más”, es bien fuerte (risas)…
– Si bueno “Un Perro Más” es como representar algo que muchas mujeres pueden sentir: cuando hay mucha gente alrededor, y la que tú quieres, no lo está. En el disco hay canciones súper bien conceptuadas, hay algunas de comedia, divertidas, juguetonas, otras de lo que pasa en el mundo, la injusticia en el mundo en que vivimos (que nadie entiende por qué lo vivimos así), y otra serie de canciones más oscuras, más simple y más íntimo.
– Es maravilloso poder hacer un disco, es todo, es desde elegir las canciones, el orden, el concepto del disco, el arte del disco… Eso yo lo extrañaba. Estoy muy muy contenta con este trabajo, de echo es el que más me ha gustado, representa mucha la evolución que he tenido como cantante, como autora y como persona, y que eso sea reflejado en la música. Hay pura buena energía en el disco.
– Yo creo que esos tiempos, si estuve muy mediática, era algo tan masivo y tan expuesto y me tengo que aguantar que sea así, hasta que mi música sea más conocida. Lo tomo así, como algo natural. Que los periodistas en el fondo juegan en eso y tal vez pueda ser un gancho más potente. Entonces no es nada malo, a seguir trabajando con mí música para posicionarlo en el lugar que se merece.
¿Sientes que el público ya se ha desmarcado un poco de esa imagen?
– Sí, es que son cosas totalmente diferentes, no tienen ningún eslabón de unión. Una cosa es mi imagen en el grupo: una chica adolescente o una mujer muy joven que estaba buscando un camino en la música. De eso ya ha pasado mucho tiempo. De hecho muchos fans de Supernova, no tienen por qué conocer mi música. Y la gente que me escucha ahora, no tiene por qué relacionarme con Supernova. No hay punto de unión.
– Si yo lo he visto, me encanta, soy fans de la música chilena. Estoy contentísima de que así sea y también me da pena que no se valore, me da pena que para tener un 20{aef1bb7b951b47d542e5b667d05364b1a2214b0201d3b3aa5ebd60a7c42dfc9c} en las radios, haya sido tanta lucha. ¡Y que gente se haya opuesto a eso! Eso me parece rarísimo. Falta que valoren a la música en sí, no que solo los ídolos sean futbolistas, faltan que los ídolos sean músicos y artistas en general. Somos un país que consume poco arte y cuando vienen de afuera, todos lo idolatran. Hay demasiada música buena, pero como somos pocos, no le puede ir bien a todos, porque es muy chico el público.
¿Estás de acuerdo que sea un 20{aef1bb7b951b47d542e5b667d05364b1a2214b0201d3b3aa5ebd60a7c42dfc9c} o podría ser un poquito más o por algo se empieza?
– O sea sí, por algo se empieza (y que bueno). Pero por otro lado tienes el ejemplo de Radio Uno que sacaron todos sus programas. Entonces una cosa por otra. Y ahí uno dice “chuta ya, música chilena con un 20{aef1bb7b951b47d542e5b667d05364b1a2214b0201d3b3aa5ebd60a7c42dfc9c} y la Radio Uno ¿Qué va a pasar?”, y sacaron los programas. Entonces siempre pasa de que quitan por aquí y quitan por otro lado. Debería ser mucho más porcentaje, tenemos artistas de todo: de jazz, reggae, rap, pop, folclor, tenemos de todos estilos musicales, entonces al tener esa variedad, existe la posibilidad de ser destacados en cualquier radio. La música chilena no es un solo estilo.
– “Sentencia de Amor Imposible” lo trabajé con Feriamusic y el segundo disco fue independiente. Y yo quise ser independiente, fue un experimento, estaba muy involucrada con los artistas de ese tipo, cantautores con su guitarra. El primer disco fue más con músicos, fuimos a lugares que tuvieran esa infraestructura para banda completa. En el segundo me fui totalmente a la independiente, toqué más con mi guitarra, más bajo perfil. Ahora volví con sello, que se la están jugando con todo, estoy súper contenta con ello. Así que feliz
– Se pueden encontrar con un disco muy bello, muy íntimo, muy acogedor, que aborda varias temáticas actuales, de la humanidad, de crítica social, de nuestra convivencia como ser humano. Se encontrarán con la Sabina de ahora, súper honesta, que no pretende grandes cosas sino que de llegar a quien quiera llegar, nada más.
¿Este es el verdadero estilo de Sabina entonces?
– No encuentro que sea mi estilo, porque yo no tengo ningún estilo. Yo soy una cantante pop al final, primero me experimenté en el folclor y me enamoré de los ritmos, estaba muy metida con los pueblos originarios, de empezar a respetarlos. Y ahora experimento algo más atmosférico, sin perder lo orgánico. Pero no sé lo que voy hacer más adelante, esa es la gracia de ser una artista pop, que puede variar, puede inventar lo que sea. Lo que yo digo es que es un disco súper honesto, ya que hice lo que quería hacer. Con eso se pueden encontrar.