Este 26 de octubre es una fecha especial para los seguidores de la música de Alex Anwandter, ya que hace exactos 10 años se publicaba el álbum Rebeldes, uno de los lanzamientos chilenos más aclamados por la crítica nacional e internacional en esa época.
Con poderosos sencillos como Tatuaje, Cómo puedes vivir contigo mismo, Tormenta o Rebeldes, este trabajo discográfico forma parte de los álbumes esenciales para entender el llamado «nuevo pop chileno» de la década del ‘2010. Ahí, junto a placas como Mena de Javiera Mena, Música, gramática, gimnasia de Dënver o Audiovisión de Gepe, se encuentra en el selecto grupo de producciones que influyeron a una generación de músicxs nacionales en la última década.
Sin embargo, Alex Anwandter, quien ya venía con un recorrido como vocalista de la banda Teleradio Donoso y su debut solista con el proyecto Odisea, quiso un paso más allá. Dentro de los elementos fundamentales de Rebeldes se encuentra la capacidad de mezclar música bailable con letras que, además de hablar tópicos clásicos como el amor y desamor, también instaló sutilmente temáticas sociales. Algo que anteriormente ya habían hecho otros artistas, sin ir más lejos, el disco Corazones de Los Prisioneros fue una de las influencias más directas.
De ahí nacen canciones como Cómo puedes contigo mismo, que hace un potente llamado a la liberación sexual. «No tengo puesto un disfraz / Ni tengo miedo de los juicios», dice parte de su letra.
A una década de este lanzamiento, el propio cantautor y productor hizo recorrido por lo que significó este álbum en su carrera. “Es como el disco de mi juventud, supongo. Es como el disco adolescente, pero lo digo en un buen sentido, ya que está muy entregado a los sentimientos y a la confusión de los sentimientos”, señaló en exclusiva para una cápsula de la agencia Collage.
“Se me hace algo muy bonito y muy propio de edad, cuando la inestabilidad todavía no es un factor y todavía no te cansa. También es el primer disco que derechamente bebía de ingredientes autobiográficos míos y eso lo usé como una manera para empezar lentamente a introducir temáticas políticas en mi trabajo, que luego intenté explorar más profundamente”, agregó el artista, quien actualmente está preparando su próximo disco.
También habló sobre la importancia de este material para la comunidad LGBTQ+, indicando que “cuando salió el disco me sorprendió que había tan poco -en nuestra sociedad de hace 10 años- de lo que yo estaba haciendo, que eran básicamente canciones súper gays que no temían verbalizarlo. Eso se puede decir que casi no existía”.
No obstante, el músico afirma que este tipo de temáticas fueron exploradas mayormente en su próximo disco, Amiga (2016). “Yo no sé si ahora diría que siento una responsabilidad (sobre ser un referente para la comunidad LGBTQ+), porque lo que dije lo tenía que decir y también ahora es más complejo el escenario. Se ha como modificado lo LGBTQ+ y ahora es algo como que se usa para vender tarjetas de crédito, literal. Entonces no veo que esa bandera signifique lo mismo”.