En el 2015 la situación era nebulosa debido a su infarto isquémico cerebeloso y, probablemente, habría sido difícil creer cuál es el presente de Jorge González. El lado izquierdo de su cuerpo se encuentra casi totalmente paralizado, caminar y conversar le es complejo, pero su mente no sólo se mantenido vivaz, sino también serena. Aunque no ha subido a los escenarios desde la Cumbre del Rock Chileno del 2017, alejado pero no aislado de la escena, Jorge nunca se ha parado de la música.
El 2017 fue editado «Antología», un disco en formato doble que recopila los grandes éxitos de su carrera solista, y ha tenido tal triunfo comercial que fue galardonado con un disco de oro. La satisfacción es clara: «El disco de grandes éxitos está súper bueno. Estoy muy contento. Estamos esperando el vinilo», comentó en una entrevista a Culto. Pero en cuanto a proyectos contemporáneos, hay novedades reales y dobles.
Por un lado, Jorge se ha abocado a explorar la música ambient, que compone desde su computador. Casi como un subtipo de la electrónica, que no es ajena a sus experimentaciones anteriores, musicalmente el énfasis se le entrega a la atmósfera que es capaz de conseguir en vez de las melodías o la propia estructura.
Por otro lado, está su proyecto literario: un libro sobre gatos qué será publicado en un mes y medio. «Son cuentos que tratan de cosas de gatos. Me gustaría escribir novelas de ficción», adelantó a Culto. La expectativa es irrelevante, lo que importa es que hoy Jorge está en paz.