En días como hoy, en que la memoria parece ser en el antídoto necesario para poder sobre llevarnos, hay espacios en que la música también nos invita a recordar. Eso fue lo que sucedió la noche del viernes en el Gimnasio Municipal de Concepción, Javiera y los Imposibles, sus imposibles en la previa a Café Tacvba lo dejaron en claro.
¿Las razones? probablemente de las más variadas. El segundo LP de Javiera y los Imposibles, «La Suerte», obra de letras sentidas considerado el primer disco de la banda y que los consolidó en un estilo propio cumple 20 años, y quisieron festejarlo en tierras penquistas antes de hacerlo en Santiago, según ellos mismos comentaron sobre el escenario.
Si la tónica de la jornada fue la celebración y el festejo por parte de quienes brindaron el espectáculo, por quienes fuimos espectadores fue como ya mencionaba antes: recuperar el tiempo perdido. Volver a conectarnos con las canciones de Javiera y los Imposibles, entender que el tiempo pasa pero que se puede regresar. Que hay sensaciones que sí vuelven.
Las canciones seleccionadas para hacernos sentir nos hicieron pasar por los temas del LP, por «Húmedad», «Tu Cama» e incluso por canciones de Violeta Parra que como bien sabemos, Javiera dedicó prácticamente todo el 2017 para recordarla y a su vez, hacerla girar por Chile en esencia y presencia.
Quiero pensar, que la vida da más respuestas que preguntas. Por la forma en Javiera y Los Imposibles nos invitaron a dialogar con lo que ofrecían en el escenario, por la importancia que se le está dando a la oferta visual de un espectáculo musical, pienso que todos entendemos que estamos en otros tiempos: hacemos el llamado desesperado a la nostalgia para que no se nos vaya, para que el pasado no sea eso mismo que estamos escribiendo y porque queremos seguir escuchando por muchos años más los temas de Javiera Parra y sus imposibles y vibrar, vibrar alto y pensar que todavía nos queda tiempo, siempre puede haber más.
Recordar como forma de volver a pasar por el corazón. Recordar desde el sur a la banda que regresa para reencontrarse con su público en ocasiones especiales.