El sábado 30 de marzo del 2019 será una fecha que probablemente, Paloma Castillo (alias Paloma Mami) jamás olvidará. Más 12 mil asistentes, según indicó la producción, fueron quienes se acercaron hasta el escenario Lotus para ver aunque sea un pelo de la ex Rojo, quien debutó en los escenarios masivos tras el cambio de fecha de La Cumbre.
Miles de fans guardaron sus puestos minutos (e incluso horas) antes de que la artista de 19 años se subiera al escenario. Pero la logística del festival jugó una mala pasada al no considerar el tamaño del espacio, respecto a la expectación que generaba la presentación de Paloma Mami, quien sin duda es el fenómeno musical del momento. Nunca en la historia del festival una artista nacional había generado tal interés, lo cual indica un precedente en la vida de una cantante que, con menos de un año de carrera, ha cautivado los oídos de los medios de comunicación y el público en general. Personas desmayadas y otros trepando los árboles para ver algo de la artista fue parte del ambiente que se vivió minutos previos y durante el show.
Pero hablemos de los 20 minutos -o 19, para ser exactos- de presentación. La cantante chilena-neoyorkina, acompañada del dj Pablito Pesadilla y cuatro bailarinas (entre ellas Nicole Meza, ex integrante de Rojo), dio inicio con su canción aún no editada en estudio «Don’t Talk About Me». Al finalizar, pidió a los asistentes que bajaran las revoluciones para continuar con el show y «perrear con respeto». Tras esa intervención, da paso a su primer single «Not Steady», cantado de principio a fin por el público. Lo mismo sucedió con las sucesoras «Fingías» y «No te enamores», esta última con Dj Luian (productor de la canción) como invitado.
Si bien fue el show más visto en streaming y uno de los más concurridos del festival, no hay que dejar pasar los errores que tuvo la presentación que, con la efervescencia del momento, fue difícil de percibir. En primer lugar, los efectos de sonido utilizados por el dj resultaba dificultoso al escuchar, es entendible que al comienzo sea para animar al público pero cuando se repiten durante casi 20 minutos es un recurso innecesario.
Sin ánimos de criticar su calidad como músico, la participación de un violinista para acompañar el single «Fingías» estuvo de sobra. Era una idea buena pero mal ejecutada, puesto que estaba fuera de tono con la canción. Finalmente, ¿qué monos pintaba Dj Luian en el show? fue un invitado que estuvo demás, no aportó en nada y sus constantes acercamientos a la artista de ¡19 AÑOS! resultaba incómodo, incluso era comentado entre el público presente.
En conclusión, se valora que una artista nacional haga historia convocando tal cantidad de público, pero no hay que omitir estos detalles para mejorar con el tiempo. Esta presentación fue un buen indicio para ser su primera vez a nivel masivo, aún queda camino por recorrer y de seguro brillará en sus próximas propuestas en vivo. Porque el diamante está, solo falta pulirlo con mejores decisiones.