«Dame Una Señal», quinto sencillo de la artista sanfelipeña, se aleja de las baladas que acostumbraban a llevar sus anteriores composiciones. Su más reciente estreno, viene acompañado de un videoclip donde participa su hermana Mariana, quien también aportó con sus voces en la canción.
Desde su debut, Natalia Montenegro ha tenido una corta, pero intensa, carrera musical. Saliendo de su estética influenciada por las baladas clásicas que caracterizaban las producciones de la artista, hoy se renueva presentando una canción que mezcla el pop del hoy con una estética del dance de los años noventa.
Bajo el título de Dame Una Señal, la canción fue producida por Milton Mahan (ex Dënver), quien logró capturar la esencia de la música pop de la década de los 90, y los arreglos de Marcelo Wilson, los que le dieron un toque contemporáneo y fresco.
El lanzamiento se distancia bastante de A mis Problemas, Detrás de tu historia, Tener un final y Valiente, cuatro producciones que iniciaron la vida musical de la intérprete y fueron lanzadas de forma independiente en plena crisis sanitaria.
En esa misma línea, el sencillo recientemente publicado presenta un hito especial para el registro profesional de la compositora, ya que además de extender sus horizontes sonoros, recalca la unión familiar al incluir a su hermana y exintegrante de Dënver, Mariana Montenegro.
Junto con aportar con su talento vocal, esta última demuestra sus capacidades adaptativas en la participación en nuevos géneros musicales, enriqueciendo la experiencia auditiva de los fanáticos. Esto también marca un antes y un después en la forma de trabajar de Natalia, pues este es el debut del perfil colaborativo de la artista, invitando a su consanguínea en este especial acontecimiento.
Respecto al recurso audiovisual acompañado el sencillo -y publicado en la red de YouTube-, estuvo bajo la dirección de Lou Marino, y la actuación de Rosa García Huidobro. El registro de tres minutos y medio logra capturar un relato nocturno mediante una estética mezclada entre lo vintage de antaño y la modernidad, el cual pasa por la melancolía, la soledad al baile y las luces de la ciudad.
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